Los botellones en el Parque de Oeste en Madrid se suceden durante todos los fines de semana, donde acuden miles de jóvenes. Esta pasada madrugada ha habido varios altercados, donde algunos lanzaron botellas y piedras a los policías, que acabaron cargando con botes de humo y disparos al aire sin munición.

Según han informado a Efe fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, la intervención en el parque, tuvo lugar entre aproximadamente las dos y las cinco de la madrugada y se ha saldado por ahora con 55 arrestados por desórdenes públicos, robo con violencia, atentado contra la autoridad, riña tumultuaria y daños.

La mayoría, más de veinte, ha sido arrestada por causar desórdenes, y al menos doce por robo con violencia, en su mayoría por sustraer móviles a chicos que estaban bebiendo con su grupo de amigos. Tres jóvenes, uno de ellos menor, fueron detenidos por apedrear un coche de la Policía Municipal.

Se trata de la segunda noche consecutiva que se registran incidentes en ese lugar, dado que en la madrugada del sábado también fueron detenidos 12 jóvenes en el mismo parque, cercano al Metro de Moncloa, en el transcurso de botellones en los que hubo robos y algún altercado.

Hubo personas heridas en el botellón

Emergencias Madrid ha informado de que el Samur atendió a nueve personas por agresiones y por heridas varias, algunos a consecuencia de los botellazos y ninguno policía. También atendió a un herido por arma blanca en la calle Isaac Peral, cercana al parque, que fue trasladado al Hospital Clínico con pronóstico reservado, así como a dos mujeres por presuntas agresiones sexuales. Además, los facultativos de emergencias también se encargaron de diez atenciones por coma etílico, tres de ellas a menores de edad.

La Policía tenia preparado el operativo

Tanto la madrugada del sábado como la del domingo se puso en marcha en la Jefatura Superior de Policía de Madrid el centro de mando denominado CECOR, dirigido por el jefe superior, Jorge Manuel Martí, y en el que han estado los responsables de Policía Judicial y de Seguridad Ciudadana.

Desde el mismo podían ver las imágenes que les reportaba un helicóptero con cámara térmica, que permitía discernir a grupos de jóvenes e incluso identificar a los que cometían algún delito.

Desde la Policía han detallado que desde primera hora de la madrugada del sábado, se congregaron cientos de jóvenes de botellón en el parque y decenas de policías de paisano vigilaban la zona, además de los efectivos uniformados que había en las inmediaciones.

Pasada la una de la madrugada se perpetraron varios robos y además algunos jóvenes lanzaron botellas al aire y se registraron agresiones, por lo que se decidió que entrase la Unidad de Intervención Policial (UIP o antidisturbios) para calmar la situación.

La noche permanecía tranquila, pero sobre las cuatro de la madrugada se volvieron a registrar desórdenes y varios grupos de jóvenes lanzaron botellas y piedras a los policías, huyendo luego hacia una zona de más difícil acceso para no ser identificados. Incluso apedrearon un coche policial yendo de incógnitos.

Hasta allí les siguieron agentes de la UIP y de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), que ante la actitud de los jóvenes utilizaron material antidisturbios como botes de humo y salvas (disparos al aire, sin munición).

Las fuentes han precisado que la intervención fue necesaria por el peligro de la situación y que no hubo heridos como consecuencia de la misma, aunque si pudo haberlos previamente por las peleas y agresiones previas.