MADRID.- La portada de Juan Luis Cebrián emulando a Darth Vader existió, aunque nunca llegó a publicarse porque fue censurada por altos cargos de PRISA. El presidente de la empresa editora de El País posa en una foto con el casco del malo de La guerra de las galaxias, tomada en uno de los despachos de la cadena SER, situada en la Gran Vía de Madrid. La imagen, autorizada por Cebrián en noviembre, iba a ilustrar la portada de la edición Smart de Jot Down, una revista mensual que se vende conjuntamente con El País.

Sin embargo, José Luis Sainz, consejero delegado de PRISA, presionó al director del citado diario, Antonio Caño, para que no la publicase porque, a su juicio, perjudicaría la imagen de la compañía. Caño cedió, los responsables de la publicación se lavaron las manos y los responsables de comunicación de unas y otras empresas se pasaron unos a otros la patata caliente, negando la mayor, hasta que El Confidencial Digital ha publicado hoy la portada.

La foto, tomada el 23 de noviembre, remitía a un reportaje que Jot Down iba a publicar coincidiendo con el estreno en España de la última entrega de la saga galáctica.

Pero Antonio Caño, amenazado por Sainz, que le transmitió que si la revista llegaba a los quioscos sería “bajo su exclusiva responsabilidad”, desistió.

Los responsables de Jot Down, por su parte, negaron que Cebrián protagonizase la portada y justificaron que el reportaje con el gancho de La guerra de las galaxias no llegó a publicarse porque no llegó a tiempo al estreno de la película.

El Confidencial Digital, que había desvelado su existencia en enero, confirma ahora que la foto y la portada llegaron a realizarse, aunque los hilos movidos por altos cargos de PRISA evitaron su publicación. El jefe de la revista reconoce ahora que Cebrián sí accedió a posar en varias fotos, tomadas por Alberto Gamazo, que no fueron elegidas por El País. Desde el departamento de comunicación de la compañía dirigida por Cebrián han preferido no pronunciarse sobre el lado oscuro de la Fuerza.