Los botes de judías con botulismo llegaron al canal de venta por error, según la empresa Hermanos Cuevas
La empresa riojana cree que, según sus conclusiones provisionales, un error humano pudo introducir en los comercios, de forma accidental, una partida de botes de cristal de alubias blancas cocidas que estaba aislada y en la que se ha confirmado la presencia de la toxina.
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LOGROÑO/BARCELONA.- La empresa riojana Hermanos Cuevas cree que, según sus conclusiones provisionales, un error humano pudo introducir en el canal de venta, de forma accidental, una partida de botes de cristal de alubias blancas cocidas que estaba aislada y en la que se ha confirmado hoy la presencia de toxina botulínica. Así lo ha explicado hoy a Efe el portavoz de la empresa, Juan Ramón Hidalgo, tras conocerse que la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) ha confirmado la presencia de la toxina botulínica en un bote de cristal de alubias blancas cocidas que consumieron el pasado día 27 dos bomberos de Palafrugell (Girona) hospitalizados por un brote de botulismo.
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"En este momento, investigamos las circunstancias por las que algunas de las unidades aisladas en la empresa fueron reincorporadas accidentalmente al canal de venta y los datos provisionales indican que pudo deberse a un error humano en el control del producto", ha asegurado. Ha reiterado el compromiso de la empresa de "total claridad y transparencia" en este caso porque lo que le importa es la seguridad del consumidor, por lo que ha recomendado a cualquier persona que hubiera adquirido uno de los productos incluidos en la alerta que se abstenga de consumirlo como medida de prevención y proceda a su devolución en el punto de venta.
La Agencia de Salud Pública de Cataluña ha levantado hoy las medidas cautelares de retirada del bacalao desmigado desalado que elabora la compañía catalana Copesco Sefrisa, tras descartase que el producto sea el origen de los dos casos de botulismo diagnosticados en Palafrugell (Girona). La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) ha confirmado hoy la presencia de la toxina botulínica en uno de los botes de cristal de judías blancas cocidas que consumieron el pasado día 27 dos bomberos de Palafrugell, que están en estado grave hospitalizados por un brote de botulismo.