Indonesia obliga a sus mujeres policías y militares a pasar una prueba de virginidad
El Gobierno del país asiático, que defiende que es una
práctica que "preserva el futuro del país", también somete
a las prometidas de los oficiales al 'test de los dos dedos'
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MADRID.- "No sólo es un acto humillante, es una tortura". Habla una doctora de un hospital militar en Yakarta. En 2008 se encargó de dirigir las pruebas físicas con las que se sometió a las mujeres que pretendían entrar en las Fuerzas Armadas. Se negó a volver a hacerlo.
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HRW ha recogido los testimonios de varias víctimas de esta prueba ─tanto reclutas como prometidas de militares─ y los de algunos médicos que la practicaron en distintos hospitales militares repartidos por todo el país.
"Lo que me sorprendió fue encontrarme con que el doctor que me iba a hacer la prueba era un hombre. Me sentí humillada", denuncia una de las víctimas de los test de virginidad de Indonesia
"Lo que me sorprendió fue encontrarme con que el doctor que me iba a hacer la prueba era un hombre. Me sentí humillada. El test va en contra de los derechos de todas las mujeres", denuncia una recluta de la academia militar de la ciudad de Bandung, recoge el informe de la ONG.
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"Los exámenes de virginidad son una forma de violencia de género y una práctica ampliamente desacreditada", denuncia la organización, que recuerda que la propia Organización Mundial de la Salud ha emitido una serie de directrices en las que deja claro que "la prueba de virginidad no es admisible y carece de validez científica".
Todas las ramas del Ejército indonesio han empleado estos exámenes durante décadas, advierte HRW, que destaca que siempre se realizan en las primeras etapas del proceso de selección para poder entrar en las fuerzas de seguridad y que forman parte del examen militar obligatorio. La organización asegura que ninguna mujer que no haya "superado" la prueba ha llegado a ser sancionada, si bien todas coinciden en definirlo de "doloroso, vergonzoso y traumático".
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Tras difundirse uno de los informes de HRW, en noviembre de 2014, la Policía indonesia confirmó la existencia de estos test de la vergüenza. "El procedimiento lleva practicándose durante mucho tiempo. Tenemos que comprobar la calidad (de las candidatas) constatando su virginidad", declaró el director del departamento legal de la Policía Nacional.
"Los exámenes de virginidad son una forma de violencia de género y una práctica ampliamente desacreditada", denuncia HRW
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El cuerpo policial indonesio planea aumentar el número de mujeres a 21.000, por lo que pasarían a representar del 3% al 5% del total. Las futuras agentes deben de tener entre 17 y 22 años y, por supuesto, no pueden estar casadas.