Humor Murcia, el nuevo Lepe
El humor en torno a Murcia se ha puesto de moda, pero tiene un origen muy difícil de ubicar. Hablamos con cómicos de origen murciano o cercanos a la Región sobre este fenómeno, del que reconocen que han aprovechado para sus chistes.
Publicidad
madrid, Actualizado:
"Tenemos sentido del humor, la prueba es que seguís vivos". Así resume Pedro Vera para Público el sentir murciano. Desde hace años, a la chita callando, Lepe ha ido pasando su centenario prestigio de ser el chiste fácil para los españoles. Un tipo de broma que servía para adaptar todo tipo de chanza: van dos de Lepe y se cae el del centro. Con tan poco bastaba.
Publicidad
Los domingos por la tarde en la tele alemana ponen telefilms sobre gente de Murcia
— Señorita Puri (@SenoritaPuri) 24 de abril de 2016
Chistes de generaciones analógicas que poco a poco fueron perdiendo chispa y virando hacia el este peninsular. Hacia un lugar de calor sofocante y en el que, dicen los más sibilinos, deberían usar subtítulos para ser entendidos: Murcia.
Siempre es complicado poner el punto de origen de una moda pero, ¿de dónde vienen las bromas sobre Murcia? Tal vez ese cántico que Ignatius promulgó de "Murcia soterrada" fuera el origen de esta nueva pandemia humorística.
"Cualquiera sabe, pero yo tengo en la mente que podía ser algo de La Vida Moderna, alguna coñita viral de esta peña que tuvo un seguimiento masivo en redes. Es mi única teoría", cuenta Pedro Vera.
Publicidad
Otras voces consideran que el programa de la cadena Ser se subió al carro de las bromas tuiteras. "Los que tenemos mas de 30 años estamos acostumbrados a Lepe pero los menores no tanto. Empezó Twitter y había que elegir una ciudad. Para los veinteañeros Lepe era desconocido y además se han criado con la gala de la región Murcia, qué hermosa eres, que es lo más casposo que se ha hecho en televisión", dice la humorista Raquel Sastre. "La Vida Moderna ha cogido un cliché que ya estaba por Internet desde hacía años y lo explotaron. El Intermedio también lleva mogollón de años haciendo chistes con Murcia", arguye. Miguel Maldonado, de No te metas en política, tampoco cree que haya demasiado parecido entre la localidad onubense y la comunidad autónoma en la que nació: "Veo más diferencias que paralelismos. Los chistes que se hacen sobre uno y otro sitio son bastante diferentes. Además, los chistes de Lepe llevan, al menos, varias décadas en el imaginario popular y, en cambio, la moda con los de Murcia es bien reciente y, en mi opinión, será fugaz".
Bromas murcianas aprovechadas por murcianos
Joaquín Reyes ha contado en diversas ocasiones que fue un murciano el que subió a Youtube todos los programas de La Hora Chanante, y no niega que en ocasiones haya usado a Murcia como recurso cómico. "A mí particularmente me hace mucha gracia el acento. Al ser murciano consorte tengo un nivel muy alto de panocho y hago muchas bromas con la idiosincrasia murciana, pero con cariño porque les adoro", cuenta a Público. Sin embargo, él no considera que Murcia sea la nueva Lepe: "No tengo esa percepción", concluye.
Publicidad
@trollkeng @perezreverte Mira, yo soy gilipollas, pero por lo menos soy consciente de ello y lo sufro e intento corregirme.
— Pedro Vera (@pedroveraOyP) 26 de agosto de 2015
Los humoristas consultados por Público, todos murcianos, reconocen que haberse subido a la ola. "He hecho muchas bromas sobre nuestros tópicos e ilustres, porque son de traca: Ortega Cano, José Antonio Camacho, Don Arturo Pérez Reverte, Chiqui de Gran Hermano, Bárbara Rey... Todos los grandes, tenemos una gran cantera", bromea Pedro Vera, autor de las viñetas Murcia explicada a los no murcianos, publicadas en El Jueves.
Joaquín Reyes: "No me gustan las bromas donde quedas por encima"
Publicidad
"Hablo de Murcia porque es mi ciudad. Es raro que un monologuista no aproveche los clichés de su zona" reconoce Raquel Sastre. Miguel Maldonado apoya la moción, no sin incluir una puntualización importante: "Aunque no lo parezca, intento que en todos los chistes se aprecie superficialmente el cariño que le tengo a la región".
¿Elitismo con las bromas sobre Murcia?
De los catalanes se dice que son agarrados, a los madrileños se les etiqueta como chulos, los gallegos de los chistes nunca se mojan... Y a los murcianos les ha tocado el sambenito de paletos. Es innegable que las bromas esconden un cierto clasismo, de ahí que los humoristas de la región traten de despejar la injusticia que arrastra el tópico.
Publicidad
Siri en Murcia alega sordera.
— Petete Potemkin (@Petetekin) 29 de diciembre de 2015
"Hay mucho desconocimiento sobre Murcia y la mayoría de las noticias que saltan a primera plana están relacionadas con la crónica de sucesos... No, sé. Yo, por mi experiencia, puedo decir que hay mucho humor en Murcia y que saben reírse de ellos mismos. De todas formas, a mí no me gustan las bromas donde quedas por encima" defiende Joaquín Reyes.
Pedro Vera: "Los que encajan peor las bromas son los potenciales votantes de estos partidos de moda de extrema derecha"
Publicidad
Pedro Vera defiende también el buen talante con el que se afronta el chiste en esta comunidad: "Los que encajan peor las bromas son los potenciales votantes de estos partidos de moda de extrema derecha, sobre todo cuando ven alguna viñeta mía sobre cuñados". Raquel Sastre propone, además, una estrategia: "En lugar de verlo como algo negativo, hay que darle la vuelta y aprovecharlo para potenciar la visibilidad de la Región. Si fuésemos tan tontos no habría murcianos trabajando en empresas punteras, ni tendríamos estas universidades. Son solo chistes y habría que tomárselos como una ficción. En Lepe fueron inteligentes y cogieron los chistes para usarlos en su propio beneficio", sentencia.
"Siempre habrá alguien que se enfade, pero creo que los murcianos saben apreciar los chistes. Además en Murcia suele haber un componente extra: una mezcla de miedo y respeto que podríamos traducir así: 'Qué animales son los de Murcia, pero ojo que en cualquier momento te abren la cabeza de un pedrazo'. Es muy difícil no reírse con esa premisa", bromea Miguel Maldonado en uso legítimo de la autoparodia.