La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, han presentado este lunes el Plan de Calidad del Aire —rebautizado como Plan A— que incluye una treintena de medidas a implantar en los próximos años como la reducción de la velocidad a 70 kilómetros por hora en la M-30 y en los accesos a la capital a partir del año que viene, la prohibición de aparcar en la zona SER (interior de la M-30) a los vehículos más contaminantes, desde 2020, y la limitación de su uso en 2025 en todo el término municipal.

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La DGT clasifica como "no sostenibles" a los vehículos de gasolina matriculados ante del año 2000 y del 2006 en el caso del diésel. Conforme a los datos del parque circulante de Madrid, en 2013 los coches de esta categoría correspondían al 28,3%, por lo que es previsible que para el periodo 2020-2025 la proporción alcance valores en torno al 20%.

En 2018 se implantará el Área Central Cero Emisiones en el distrito Centro. El plan incluye que los taxis que se renueven a partir de 2018 deberán ser etiquetados como CERO o ECO. Además la EMT contará con una flota de bajas emisiones en 2020 y se desarrollarán plataformas reservadas de autobuses.

Además, se rediseñarán las principales calles para reducir "el espacio dedicado al automóvil" y potenciar los carriles bici y el transporte público y el espacio para el peatón. Además, se crearán "zonas 30" en las que los vehículos no podrán circular a más velocidad que los 30 kilómetros por hora, como la que se proyecta ya para buena parte del distrito de Chamberí, y se incrementarán de forma progresiva las plazas de aparcamiento subterráneo dedicadas a los residentes en detrimento de las de rotación.