Público
Público

La brecha salarial afecta a más de la mitad de las universidades públicas españolas

Al menos tres de cada cuatro cátedras las ocupan hombres, mientras que las mujeres predominan en el nivel inferior de profesorado contratado, con ingresos más bajos.

Otras miradas - Una Universidad Pública para una sociedad justa y democrática
Imagen de un aula de la Facultad de Derecho en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid, a 6 de junio de 2022, en Madrid. Gustavo Valiente / Europa Press

El "techo de cristal" sigue existiendo en las universidades españolas. Así lo ha reflejado el estudio sobre la brecha salarial de género realizado por el Ministerio de Universidades, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas –CRUE– y La Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad de la Acreditación –ANECA–.

El dossier, que recoge los datos de 48 universidades públicas de España en 2021, denuncia que, en términos generales, existen desigualdades en más de la mitad de las universidades. La diferencia entre el sueldo que obtiene el hombre y la mujer en la mayoría de estas instituciones educativas se sitúa por encima del 20%, siendo en algunos superior al 30%.

La Brecha Salarial de Género (BSG) es la diferencia entre las retribuciones brutas anuales medias de mujeres y hombres expresada en porcentajes. Este número, explican en el estudio, da pistas relevantes sobre las desigualdades entre el hombre y la mujer. El resultado es reflejo de las condiciones laborales de ambos grupos.

El sueldo del profesorado en la universidad pública depende de la categoría laboral que ocupe. La categoría más baja –con los menores ingresos– es la de profesor o doctor asociado. Este primer nivel es el más numeroso. El 29,5% del profesorado total pertenece a este grupo; seguido del de profesor titular, con un 21,7%. La categoría laboral más importante, la de catedrático, representa tan solo el 10,4% del total de profesionales.

La segregación vertical se da cuando existe sobrerrepresentación en los distintos niveles. Es por eso que en el panorama español, siete de cada diez catedráticos son hombres, mientras que las mujeres suelen permanecer en el puesto de profesor o doctor asociado. 

Las profesoras de 40 a 49 años son el grupo más vulnerable

El informe refleja una tendencia al alza de la BSG del salario total en los primeros años de carrera profesional. Las profesoras de 40 a 49 años están más expuestas a la brecha salarial. A partir de esta edad, la tendencia se va igualando respecto a los profesores hombres.

En relación a la media del salario base, –la remuneración fija que recibe el trabajador tradicionalmente al mes– registra la mayor desigualdad salarial entre las profesoras cuya edad va de los 30 a 39 años. Las principales diferencias vienen marcadas por la brecha salarial de género en los complementos, tales como el salario en función de sus circunstancias o el trabajo realizado muestra valores medios o altos en todas las ramas. Las brechas más altas en esta parte del salario se dan en Ciencias de la salud (27,4%) y en Ciencias (19,4%).

La brecha se abre en la investigación científica

La diferencia también está presente en la investigación en el ámbito universitario en estos últimos años. Durante la pandemia, las mujeres se han ocupado en mayor medida de los trabajos domésticos y de cuidados. Esto, señala el informe, ha tenido su reflejo en el mundo académico, abriéndose aún más la brecha de género en la producción científica.

El análisis realizado por ramas de enseñanza revela que, en el salario total, las ramas de Ingeniería y Arquitectura, y de Ciencias Sociales y Jurídicas presentan BSG bajas (en torno al 2%). El índice se acentúa con respecto a las otras tres ramas, en las que se supera el 12%, siendo Ciencias de la Salud la que presenta la BSG más alta (18%).

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias