"Es el acto político más extraño e inútil de mi vida pública". Así ha definido José María Cazalis, senador del PNV, el Pleno celebrado este miércoles en el Senado. Los grupos de la Cámara Alta han reprochado de forma severa al PP que hayan decidido forzar un Pleno extraordinario, fuera del periodo de sesiones, para que compareciera el presidente del Gobierno, a sabiendas de que se encuentra en Suiza asistiendo al Foro Económico de Davos.

Los portavoces de los grupos han calificado de "bochornoso", "esperpéntico" o "circo" la sesión y han acusado al PP de ensuciar la imagen de la Cámara y de utilizar la institución de forma partidista. Los conservadores habían pedido la comparecencia del líder del Ejecutivo para que explicara el contenido de la reunión mantenida con el president de la Generalitat de Catalunya, Quim Torra, en diciembre.

Los senadores de ERC y del PSOE han abandonado el Pleno. EL grupo catalán lo ha hecho al comienzo, cuando su portavoz, Mirella Cortés, ha solicitado al presidente de la Cámara la suspensión de la sesión por entender que el orden del día estaba agotado al no acudir Pedro Sánchez. Pío García-Escudero le ha recordado a la senadora que la Junta de Portavoces había decidido en su reunión de la mañana que el Pleno se mantendría y que los representantes de los grupos tendrían un tiempo limitado de intervención.

Los socialistas habían advertido que, si el portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, tomaba la palabra, abandonarían el Pleno. Cuando el senador conservador se ha dirigido a la tribuna, el grupo se ha marchado de la sala.

Antes de esta imagen, los grupos de PSOE, Unidos Podemos, ERC, PNV, PDeCAT, Coalición Canaria y el Grupo Mixto (incluidos los representantes de Ciudadanos) han afeado a los conservadores su decisión de mantener el Pleno y han lamentado que resultará "muy difícil de explicar" a la ciudadanía la utilidad de la sesión que se ha celebrado.

"Esto es el Senado de España y no su gabinete de crisis", le ha espetado el portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, a Cosidó, a quien ha acusado de utilizar la Cámara Alta como un "escudo personal" para defenderse de las acusaciones que lo involucran en la denominada "Operación Kitchen".

El portavoz del PP en el Senado ha escudado su decisión tras la facultad que la Constitución otorga a la Cámara para controlar la labor del Gobierno y ha acusado al PSOE y a la "izquierda" de no respetar la democracia. "Esos escaños vacíos nos da una muestra más de que en España la izquierda está en las instituciones cuando tienen mayoría, cuando no la tienen, está contra las instituciones".

Gil le ha recordado en este sentido que el líder del anterior Ejecutivo, Mariano Rajoy, "plantó" en numerosas ocasiones al Senado en las sesiones de control. Ramón Espinar, portavoz de Unidos Podemos, ha dicho que Cosidó está "acumulando méritos" para irse de la política que se suman a su gestión al frente de la Policía, y ha dedicado buena parte de su intervención a defender el diálogo con Catalunya.

El grupo de ERC ha registrado en la Mesa del Senado un escrito para preguntar el detalle del coste total de los desplazamientos de los senadores para asistir al Pleno, así como si se han tenido que abonar horas extras a los trabajadores de la Cámara, puesto que en enero finalizan su jornada laboral a las 15 horas.