Propuesta de Unidas Podemos Sánchez se pone de perfil ante la regularización de migrantes que plantea su socio de Gobierno

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha evitado este miércoles contestar si el Ejecutivo contempla o no una regularización masiva de migrantes, como la que sólo unas horas antes ha reclamado su socio en el Ejecutivo, Unidas Podemos. 

En su comparecencia en rueda de prensa junto al primer ministro italiano, Giuseppe Conte, preguntado en concreto por esta materia, Sánchez ha defendido que el Gobierno ha "regularizado la situación" de personas vinculadas a "colectivos del sector agroalimentario", para que estas "salgan de la situación de anormalidad y economía sumergida y puedan trabajar".  

Sánchez responde que el Ejecutivo ya ha "regularizado la situación" de personas vinculadas a "colectivos del sector agroalimentario"

Sobre la propuesta de Unidas Podemos, por contra, no ha dicho una palabra. El portavoz de la formación en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique, explicó un par de horas antes los detalles de la iniciativa para la regularización de todos los migrantes que ya estaban en España cuando se decretó el estado de alarma, que además han remitido al resto de formaciones parlamentarias para buscar apoyos.

Echenique no quiso desvelar la posición del PSOE, si bien la ministra portavoz, María Jesús Montero, descartó hace días que esta cuestión hubiera sido abordada en Consejo de Ministros. 

En la misma comparecencia, Sánchez ha recordado que España, Italia y Portugal comparten que la UE debe llegar a un acuerdo sobre los fondos de reconstrucción tras el coronavirus en el mes de julio, y se ha referido a las nuevas informaciones sobre las actividades del rey emérito, Juan Carlos de Borbón, como "perturbadoras" e "inquietantes". 

Además, preguntado por la reciente polémica por las palabras del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias -"Cualquiera con responsabilidades" en el periodismo o en la política "está sometido tanto a la crítica como al insulto"-, Sánchez ha asegurado que el Ejecutivo defiende "la libertad de prensa".

No obstante, ha evitado hacer ninguna "valoración" sobre esta materia, afirmando que ha rechazado opinar cuando él mismo ha sido objeto de "valoraciones muy negativas" por parte de la prensa. "Si no lo he hecho de mi, no lo voy a hacer de nadie más".