El secretario general del PSOE se desplazó este miércoles a Oviedo para celebrar una nueva asamblea abierta, en la que por primera vez se refirió a las medidas anunciadas por el Gobierno sobre las pensiones (relativas a eliminar el IRPF en algunos tramos y subir las de viudedad), para calificarlas de meros “parches” que no afrontan el problema.

Sánchez indicó que el Gobierno sólo busca “parchear” la situación para salir al paso de las movilizaciones de los pensionistas, pero que el problema se seguirá agravando. De hecho, advirtió de que en la actual situación los pensionistas españoles verán una merma del 11% en su poder adquisitivo en cinco años, y apuntó que estos datos son del propio Gobierno.

Por ello, insistió una vez más en que hay que buscar una solución a corto y a medio plazo, y aseguró que el PSOE la tiene. “Nosotros vamos a la mayor y, por ello, lo primero que haremos será derogar la reforma laboral que es la que nos ha conducido a esta situación”. Sobre este aspecto, dio un dato que levantó murmullos en la sala, al afirmar que la masa salarial de España es hoy la misma que había en 1989. “Es toda una involución”, añadió.

El líder socialista quiso transmitir un mensaje de esperanza ante el temor manifestado por varios asistentes sobre el futuro del sistema público de pensiones. En este sentido, afirmó que hay recursos si hay voluntad política, por lo que pidió no creer las justificaciones de las “dos derechas” porque, según dijo, “encubren con argumentos tecnocráticos una pura ideología conservadora”, afirmó.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con el líder de los socialistas asturianos, Adrián Barbón. EFE

Por ello, rechazó las rebajas fiscales que están proponiendo PP y Ciudadanos ya que, en su opinión, es para seguir debilitando al Estado de Bienestar. Sánchez apelo a la solidaridad y prometió que pagarán mas lo que más tienen, porque “hay que blindar la sanidad, la educación, la dependencia y las pensiones”, dijo.

Hubo también en la reunión algún llamamiento a la unidad interna del PSOE tras las primarias que Sánchez secundó, y le pidió a una señora que había encabezado una plataforma “pro-Pedro” en el proceso interno de mayo de 2017, que la mantuviera ahora denominándola “pro-PSOE”.

Sánchez, sabedor de que estaba en Asturias, terminó su intervención hablando del carbón y adquirió tres compromisos que fueron muy aplaudidos: garantizar la autonomía energética de España contando con el carbón como reserva estratégica; alinearse contra el calentamiento global y buscar soluciones alternativas y, por último, asegurar que cualquier acuerdo sobre el sector debe ser consensuado por el Gobierno central, los autonómicos y los trabajadores.

El líder socialista, que el martes intervino en este mismo formato en la Línea de la Concepción (Cádiz), continuará este jueves su periplo de asambleas abiertas, en esta ocasión en A Coruña.