La derogación de parte de la reforma laboral y aprobar la nueva ley de libertades sexuales serán prioritarias en la acción del Gobierno para el próximo trimestre, según se acordó este sábado en la reunión celebrada en Quintos de Mora (Toledo) de todo el Ejecutivo.

En un ambiente distendido, según reconocieron todos los participantes, cada ministro expuso las prioridades de sus departamentos pero, sobre todo, se fijaron objetivos a corto, medio y largo plazo para la legislatura que, según dijo el propio presidente, Pedro Sánchez, será de un "gran dinamismo legislativo".

Para el trimestre, además, se da por hecho que saldrán adelante las iniciativas que se desarrollen a través del Grupo Socialista o de Unidas Podemos, como puede ser la ley de Eutanasia o la derogación del veto del Senado al techo de gasto.

El Gobierno quiere que en los próximos Consejos de Ministros se empiece a derogar parte de la reforma laboral del Partido Popular, tras previo acuerdo con los agentes sociales, aunque los puntos que decaerán de forma inmediata llevan ya acordados con los sindicatos desde la anterior legislatura.

La derogación inmediata del artículo que permitía el despido por bajas encadenadas posiblemente vaya a la próxima reunión del Consejo de Ministros, pero también se quiere limitar y regular la subcontratación, recuperar la primacía del convenio sectorial sobre el convenio de empresa o la recuperación de la ultraactividad para que los convenios no pierdan su vigencia.

Además, como ya anunció la propia ministra de Igualdad, Irene Montero, se espera que "en semanas" lleve al Consejo de Ministro la ley de libertades sexuales que incluirá modificaciones en el Código Penal, de las cuales la más conocida es la del "sí es sí".

También se habló mucho en la reunión de la situación económica, de los Presupuestos Generales del Estado que se van a presentar y de la necesidad de mantener la estabilidad presupuestaria, algo que no olvidó mencionar la vicepresidenta económica, Nadia Calviño.

Balances positivos

Los cuatro vicepresidentes hicieron balance de la reunión, y todo en clave muy positiva. Calvo dijo que en la reunión se habían marcado mejorar en cuatro objetivos: brecha entre el mundo rural y urbano; los derechos perdidos tras la crisis; los desequilibrios territoriales, y la igualdad entre hombres y mujeres. La vicepresidenta primera salió tan eufórica que habló de un proyecto de hasta cincuenta años.

También se mostró satisfecho el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, quien destacó que había sido un "debate trasversal y muy enriquecedor", donde el Gobierno quiere apostar claramente por las políticas sociales,"y poner a España en la cabeza de la justicia social", dijo.

El encuentro duró unas nueve horas y, según admitieron todos los participantes, el Gobierno de coalición, de momento, parece que está "muy coordinado", según un dirigente de La Moncloa. El encuentro, según fuentes oficiales, fue "muy productivo" y sirvió para poner en común las políticas que se quieren desarrollar a lo largo de la legislatura.