Cargando...

Una querella de supervivientes del nazismo y familiares puede acabar con la impunidad del franquismo

Publicidad

"Era la puerta de atrás para acabar con la impunidad del franquismo, y se dieron cuenta de la jugada". Con estas palabras, fuentes de la acusación del ‘caso Mauthausen' definen la batalla jurídica y política desatada respecto a la justicia universal, que ha terminado con la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial para limitarla y ordenar el archivo de las más de una docena de causas abiertas en la Audiencia Nacional.

Publicidad

El llamado ‘caso Mauthausen', que instruye Ismael Moreno, titular del Juzgado Central número 2 de la Audiencia Nacional, se centra en el encarcelamiento y exterminio de miles de españoles en tres campos de concentración nazi durante la II Guerra Mundial.

Click to enlarge
A fallback.

EL caso se abrió con la querella interpuesta por cinco supervivientes o familiares de españoles encarcelados en tres campos de concentración. La querella está dirigida contra cinco nazis de las SS que vivían en Estados Unidos y que fueron desnacionalizados allí al descubrirse su pasado, por lo que podían ser juzgados en España si no se juzgaban en sus países de origen.

La querella se presentó con la apariencia de un caso de justicia universal pero, en realidad, se ancla en la jurisprudencia sentada por el Tribunal de Nuremberg tras el fin de la II Guerra Mundial. Y tiene como telón de fondo una jugada de largo alcance: acabar con el edificio legal y jurídico de la impunidad del franquismo construido desde la Ley de Amnistía de 1977 y confirmado con la Constitución de 1978.

Publicidad

El objetivo final de la estrategia jurídica de este caballo de Troya es "abrir la competencia de la jurisdicción de los tribunales españoles" en delitos de lesa humanidad cometidos contra sus nacionales durante la II Guerra Mundial y, posteriormente, abarcar con esta jurisprudencia delitos del franquismo ya que España fue parte del Eje alemán. Así lo aseguran fuentes del Equipo Nizkor de derechos humanos.

Este caballo de Troya es complejo, por la doctrina en materia de derecho internacional que contiene y el cruce de sentencias en las que se ampara la querella.

Publicidad

La querella del ‘caso Mathausen' fue interpuesta en el año 2008 y es la primera en Europa que se basa en la sentencia del Tribunal Militar Internacional de Nuremberg de 1945, en lugar del Derecho penal interno.

Sólo en Mathausen estuvieron internados más de 7.000 españoles, de los que se ha confirmado el exterminio de 4.300. La mayoría de ellos eran presos políticos, muchos republicanos que eran prisioneros de guerra y que estaban combatiendo en la II Guerra Mundial, o detenidos deportados desde Francia.

Publicidad

España, como otros países, al entrar en 1955 a formar parte de Naciones Unidas aceptó la sentencia de Nuremberg dado que es la base doctrinal de la constitución de la ONU.

La construcción de la arquitectura jurídica, con la doctrina que lo sustenta, costó cuatro años de investigación y estudio a Nizkor. Este equipo internacional es el que estuvo detrás del caso de Adolfo Scilingo, el militar argentino condenado por el Tribunal Supremo en 2007 y que supuso otra forma de abrir la competencia de la justicia española, en este caso para los crímenes cometidos contra españoles en Argentina.

Publicidad

La querella ha suscitado desde el año 2008 movimientos diplomáticos entre los países más afectados: Alemania -que condenó a sus nazis con el Código Penal interno, pero no con la doctrina de Nuremberg-; España -país donde se presenta la querella cometida contra republicanos exterminados por el nazismo-; Estados Unidos -donde viven o vivían los nazis querellados- y Francia, ya que se podría intentar la apertura de una causa similar en el país galo. La razón: muchas víctimas españolas tenían la doble nacionalidad francesa porque Francisco Franco las dejó sin nacionalidad y Francia se las concedió.

El freno del Gobierno español comenzó con la presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero, que creó un gabinete en la sombra para gestionar estos casos y promovió la Ley de Memoria Histórica; y ha seguido con el Gobierno del PP, que hace escasos meses realizó una reforma para limitar la concesión del llamado "título de viaje" sólo para casos humanitarios. El título de viaje es un instrumento jurídico soberano y muy utilizado para facilitar el viaje a personas indocumentadas, apátridas o con problemas de nacionalización. Era la fórmula defendida por Nizkor para traer a estos nazis a España.

Publicidad

Los cinco casos de los nazis querellados son paradigmáticos, al igual que los cinco casos de víctimas españolas que sustentan la querella.

Sobre los cinco SS pesan pruebas indubitables de haber formado parte del Batallón de la Calavera nazi (Batallón SS-Tontenkopf) en los campos de concentración de Mathausen (Austria), Sachsenhausen (al norte de Berlín) y Flossenbürg (cerca de Weiden, también el Alemania).

Publicidad

Mathausen estaba centrado en el exterminio de presos políticos, en especial, y se componían de 23 campos de concentración. Por su parte, Sachsenhausen era la "academia" donde se formaban los batallones de la muerte de las SS y donde se encarcelaban a los opositores políticos alemanes y a los prisioneros políticos europeos de alto rango, como fue el caso del español Francisco Largo Caballero. Y Flossenbürg era un campo de exterminio de elementos antisociales pero que, con el tiempo, fue recibiendo cada vez más prisioneros políticos y allí acabaron con la vida de una cincuentena de españoles deportados desde Francia en convoyes masivos.

De izda. a dcha., los miembros de las SS John Demjanjuk, Josias Kumpf y JohannLeprich. Fotos: E. Nizkor.

Publicidad

Los cinco nazis querellados vivían en Estados Unidos, pero fueron desnacionalizados en procesos judiciales al descubrirse su pasado criminal. Estas pruebas fueron confirmadas por la Corte Suprema norteamericana en la mayoría de los casos.

Las pruebas contra ellos se sustentan, además, en documentos originales como es el Libro de Muertos original de Mathausen, que los nazis no pudieron eliminar como ocurrió en otros campos de concentración. En este Libro figuran centenares de españoles, con sus nombres, apellidos, sus pueblos de nacimiento y la hora a la que los SS los mataban. El nombre en alemán de este Libro es Totenbuch y constituyó una prueba esencial del Tribunal de Nuremberg.

Publicidad

También figura como pruebas el censo de españoles exterminados, la sentencia de condena a militares SS -traducida al español- del Tribunal Militar soviético de 1947 y el informe del instructor Eugene S. Cohen, de 1945, que sirvió de sustento del proceso de Nuremberg. [Toda la documentación se puede encontrar aquí].

Los nazis querellados son Johan Leprich y Anton Tittjung, ambos residentes en Michigan y que fueron guardias de las SS Totenkopf de Mathausen. Ambos participaron en la persecución de judíos, gitanos y prisioneros políticos europeos, entre los que se encontraban los españoles.

Publicidad

También residía en Wisconsi Josias Kumpf, miembro de las SS del campo de Sachsenhausen, especializado en evitar que los prisioneros escaparan, entre ellos los españoles. Fue deportado de Estados Unidos en el año 2007.

El cuarto querellado es Iwan o John Demjanjuk, el más conocido de todos, descubierto en Ohio. Fue guardia de campo de las SS en Flossenbürg. Fue deportado de Estados Unidos en el año 2008 y juzgado y condenado en Alemania por complicidad en asesinato.

En este tiempo alguno de los nazis ha muerto y se han esgrimido la salud como argumento para evitar enviarlo a España.

El juez instructor Ismael Moreno dictó el 17 se septiembre de 2009 auto de procesamiento contra Johann Leprich, Anton Tittjung y Josias Kumpf.

Igualmente, el 7 de enero de 2011 dictó auto de procesamiento contra John Demjanjuk y acordó librar la correspondiente Orden Europea de Detención y Entrega a las autoridades alemanas bajo cuya jurisdicción se encontraba.

La última fase de este juego de ajedrez ha sido la ampliación de la querella sobre el SS Theodor Szehinskyj. Residía en Pensilvania cuando fue descubierto, y fue desnaturalizado de Estados Unidos en el año 2005, tras una sentencia definitiva de la Corte de Apelaciones para el tercer circuito.  Era un guardia de campo de las SS-Totenkopf-Sturmbann que, además, se dedicó al transporte de prisioneros desde Sachsenhausen al campo de concentración de Mauthausen, tras lo cual, con bastante probabilidad, fue destinado como guardia al de Flossenburg.

El pasado 22 de marzo de 2013, el Juzgado dictó providencia y ordenó el libramiento de Comisión Rogatoria Internacional a las autoridades de EE.UU sobre Szehinskyj. Las autoridades norteamericanas contestaron afirmativamente. Nada se ha sabido desde entonces.

Publicidad