MADRID.- Acompañado de toda su Ejecutiva, el todavía candidato del PSOE a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, compareció ante los medios de comunicación para anunciar que no se va, que dará la batalla en los órganos internos del PSOE y hasta en los tribunales, y que no asume la decisión de Ferraz de crear una gestora en el Partido Socialista de Madrid (PSM) ni que sea apartado como secretario general.

Gómez achacó esta decisión a la debilidad del liderazgo de Pedro Sánchez, y aseguró que “bastantes dirigentes territoriales consideran que esta decisión es un atropello”.

Afirmó que se enteró de la decisión por los medios de comunicación y sólo después tuvo una breve charla con Pedro Sánchez, quien le explicó que la decisión se debía a la inestabilidad interna en la federación madrileña.

Gómez indicó que no se declara en rebeldía, pero que va a defender hasta el final la democracia, a su partido en Madrid y, sobre todo, su honorabilidad.

"Mi interpretación es que es una construcción de la derecha que el secretario general se sube a ese caballo con el único objetivo de fortalecer este liderazgo de cara a los procesos que vienen después de mayo".

En su opinión, la decisión sólo se puede entender como un intento de Sánchez de reforzar su cargo como secretario general del PSOE, “pero esto hará mucho daño al PSOE, y ha sido un inmenso error”.

El dirigente madrileño, que ya se enfrentó a José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que dará la batalla e hizo un pronóstico: “Esto está lejos de haberse acabado, sólo acaba de empezar”.