Oposición Los pactos de Cs con el Gobierno les alejan del PP y dejan a Casado solo con Abascal
Fuentes populares, cercanas a las tesis de Casado, señalan que Ciudadanos se "está pegando un tiro en el pie" tras pactar con el Ejecutivo de coalición y que actúan como el "tonto útil" de Sánchez.
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Ciudadanos ha vuelto a pactar con el Gobierno. En esta ocasión, ssu apoyo a la convalidación del decreto ley que regulará "la nueva normalidad" tras finalizar el estado de alarma. Los diez diputados naranjas se unen, así, al PNV, por lo que el Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez tiene asegurado que el decreto salga adelante. Con esta decisión, unida a los acuerdos previos sobre la prórroga del estado de alarma, los naranjas han hecho una enmienda a la estrategia del expresidente de la formación, Albert Rivera, cuya ejecutiva aprobó un veto al PSOE y estableció al PP como "socio prioritario" de cara a los pactos.
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Su estrategia confronta con la del Partido Popular, con el que comparte gobiernos en cuatro autonomías y decenas de ayuntamientos, que se niega a llegar a acuerdos con el Ejecutivo con la hipótesis de un adelanto electoral en 2021 por el desgaste del actual Gobierno de coalición. Los populares liderados por Pablo Casado votaron en contra de las dos últimas prórrogas del estado de alarma y algunos de sus miembros, como la portavoz en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, tacharon de "error" el pacto entre Cs y el Gobierno. "Cs me ha decepcionado", dijo la diputada por Barcelona la pasada semana.
Dirigentes y diputados del PP consultados por Público admiten que se ha producido un "distanciamiento" entre ambas formaciones, pese a que públicamente tanto Pablo Casado como Inés Arrimadas aseguran que todo va bien. Hay quien opina que el líder del PP fue "demasiado ingenuo" al pensar que la absorción de Ciudadanos era inminente. "Tienen el valor de cualquier partido minoritario pero en este momento es mucho", apunta una fuente de la dirección popular en el Congreso. "Mira lo caro que está el escaño ahora".
La opinión más compartida en el PP es que los de Arrimadas están haciendo valer sus 10 escaños. Eso sí, a costa de "contradicciones", como pactar con el Gobierno al mismo tiempo que lo hace Bildu o el PNV, partidos que teóricamente, son antagónicos a Ciudadanos. "Lo de pactar con el Gobierno por la tarde y que por la noche se anunciara lo de Bildu fue tremendo, pero luego Cs no le dio mucha importancia. Nos sorprendió muchísimo", confiesa una fuente conservadora.
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Fuentes populares, cercanas a las tesis de Casado, creen que Cs es el "tonto útil" para Pedro Sánchez
Otras voces, cercanas a las tesis de Pablo Casado, no comparten la estrategia de su socio de Gobierno y señalan que los naranjas son los "tontos útiles" del Gobierno y "se están pegando un tiro en el pie". Se muestran "totalmente convencidos" de que que finalmente Sánchez les "traicionará" cuando le dejen de ser útiles. "Sánchez antenpodrá a los independentistas, sobre todo porque Podemos le presiona por ese lado. Mientras tanto Cs es el tonto útil".
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"Sánchez habla de Casado y Abascal como si fueran gemelos"
Los pactos de Ciudadanos y Gobierno también han roto "el mito de las tres derechas", en palabras de los populares. Sin embargo, advierten, esto ha contribuido a que Casado se quede solo con Abascal en el 'no', lo que tampoco gusta a algunos sectores del partido, que piden alejarse de los ultraderechistas. "El papel que ha adoptado Ciudadanos debería ser el nuestro: críticos con el Gobierno, pero a su lado en cuestiones de estado, como esta", opina un diputado con larga trayectoria a este diario.
En el PP señalan que la estrategia de Sánchez es "hablar de Casado y Abascal como si fueran gemelos" para dar la impresión de que "son lo mismo". "Y las declaraciones de Cayetana no ayudan, precisamente, a alejarnos de esa imagen", apostilla otra voz del grupo popular, que recuerda el malestar en el partido después de ésta que llamara al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, "hijo de un terrorista".
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Por su parte, el líder del PP ha vuelto a jugar la baza de la "moderación" frente a los barones y altos cargos del partido. Casado apeló al "PP sensato y moderado" en su discurso en la Junta Directiva Nacional, el máximo órgano entre congresos, el pasado lunes. "Ser moderado es ajustar las palabras y los actos a la realidad de lo que ocurre", dijo. Unas palabras que contrastan con el tono que ha empleado las últimas semanas contra Sánchez, al que, en el último debate sobre el estado de alarma, acusó de liderar el Gobierno "menos democrático de nuestra democracia" y de ser el "presidente más radical".
Cs seguirá negociando pero insiste: "No somos socios"
Este martes, el portavoz adjunto de Cs en la Cámara Baja, Edmundo Bal, ha defendido el estado de alarma como un instrumento "útil" y "necesario" que ha salvado la vida de miles de personas y ha lanzado un mensaje al Partido Popular y Vox, que, a diferencia de Ciudadanos, votaron en contra de las últimas prórrogas del estado de alarma y se negaron a pactar con el Ejecutivo. "¿Qué han hecho otros? Otros se han quejado de que no había 'Plan B' pero no han aportado nada. Nosotros nos hemos arremangado", ha dicho.
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La dirección del partido se muestra "muy satisfecha" con los acuerdos alcanzados y aseguran a Público que no está en sus planes romper la interlocución con el Gobierno que definen como "buena, cordial y transparente". Es más, este martes Bal ha abierto la puerta a apoyar la ley para la protección a la infancia, que acaba de aprobar el Ejecutivo. Sin embargo, advierten, tanto en público como en privado, de que "no son socios de Sánchez ni lo van a ser".
Además, quitan importancia a las bajas del partido y lo atribuyen a que están recuperando la "centralidad" del tablero. "Primero se fueron los más cercanos a la izquierda y ahora los más derechistas", bromean fuentes de la dirección. Hace unas semanas fue la del exportavoz de la formación en el Congreso, Juan Carlos Girauta, que ha protagonizado duros ataques a Cs desde entonces, y la de su homóloga en el Ayuntamiento de Barcelona, Carina Mejías, ambos sin cargo orgánico. Una semana después se produjo la de Marcos de Quinto, diputado por Madrid, que tras confirmarse el 'sí' de su formación a la quinta prórroga, anunció que se marchaba al no compartir la posición de su grupo.