El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, rompió este jueves su silencio para asegurar que "está esperanzado" en alcanzar un acuerdo para presentarse a una segunda investidura, y pidió al resto de grupos parlamentarios, "generosidad, responsabilidad y altura de miras", afirmó.

A las puertas del hemiciclo, antes de iniciarse el pleno sobre política migratoria, Sánchez explicó que funda sus esperanzas en una "ambiciosa" propuestas programática que va a presentar a los partidos políticos la próxima semana. 

Sánchez  aunque dijo que dicha propuesta programática es para a "todos los grupos", el mensaje estaba claramente dirigido a Unidas Podemos, al recalcar que dicha propuesta será "progresista, reformista, ambiciosa y transformadora y modernizadora".

El dirigente socialista explicó que su propuesta programática, con más de 300 medidas, pretende afrontar tres problemas. "Atajar la desigualdad, crear oportunidades para la gente que no tiene oportunidades y modernizar nuestra economía para garantizar un crecimiento sostenido", afirmó Sánchez.

El presidente indicó que dicha propuesta recogerás las propuestas de las organizaciones sociales con las que se ha reunido, a las que agradeció su cooperación porque, según dijo, "han demostrado que España tiene una sociedad civil viva, que quiere un Gobierno que arranque y que responda a las muchas demandas y problemas que tienen los ciudadanos", dijo.

Sánchez también explicó que este fin de semana se dedicará a ultimar dicha oferta programática que contendrá más de 300 propuestas, donde también se incorporarán una buena parte de propuestas que Unidas Podemos llevó en su programa electoral.

Podemos, para el final

El presidente en funciones también confirmó que será la próxima semana, a partir del miércoles, cuando inicie la ronda de contactos con los grupos parlamentarios para presentar la propuesta e intentar recabar su apoyo a una segunda investidura, aunque en esta ocasión parece que su "socio preferente" quedará para el final de la negociación. De hecho, el propio secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, no exlcuyó que se celebre la tercera semana de septiembre, lo que supondría llevar al límite el calendario para celebrar una nueva investidura.

Sánchez, pese a que no ha vuelto a hablar desde el 25 de julio con ningún partido político -como recordó minutos antes el portavoz del PNV- aseguró que su partido sigue trabajando para no repetir las elecciones, "y me gustaría que el resto de grupo parlamentarios hicieran lo mismo, y antepongan los intereses de España a los de cada uno de los partidos políticos"; afirmó.

Finalmente, el dirigente socialista insistió en que los ciudadanos hablaron muy claro el 28 de abril, "para no tener que vernos abocados a unas nuevas elecciones y podamos tener Gobierno. Yo creo que los ciudadanos españoles se lo merecen", concluyó.