Los nazis de Pánzer exigen al juez que les absolvió que les devuelva todas sus armas incautadas
La destrucción de las armas
Publicidad
Actualizado:
José Antonio Andrés Orts, militar y dirigente de la banda nazi FAS, desarticulada en Valencia en 2005 durante la Operación Pánzer, ha reclamado la devolución de todo el arsenal de armas incautados en sus domicilios por la Guardia Civil, amparándose en la sentencia absolutoria dictada por la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia.
Publicidad
En los escritos presentados por el abogado del militar, adscrito a servicio de Inteligencia del Ejército de Tierra, fechados los días 4 y 14 del presente mes de septiembre, se reclama a la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia “la devolución de los objetos que fueron incautados... como consecuencia de la entrada y registro realizada en el presente procedimiento, habida cuenta de… la sentencia absolutoria”, dictada el 30 de julio del 2014 y ratificada por el Tribunal Supremo en julio de este año.
La sentencia absolutoria se produce tras ser declaradas ilegales las escuchas telefónicas
José Antonio Andrés reclama que le sean devueltas una veintena de armas, accesorios y objetos militares de simbología nazi u ultra. Entre las armas relacionadas se pide expresamente la devolución del Lanzagranadas C-90 –cuya imagen tomada por la Guardia Civil causó un gran impacto mediático- cuatro revólveres de los calibres 38 y 22, una pistola Walter modelo P-99, varias escopetas, rifles, carabinas y armas cortas diversas, entre otras cosas.
Publicidad
Asimismo el dirigente de la banda ultra desarticulada, y que con la sentencia absolutoria de la Audiencia de Valencia podría volver a reorganizarse, reclama la devolución de un casco militar nazi, un chaleco antibalas, una hebilla de soldado alemán, botellas de vino con etiqueta nazi, un escudo de caucho con la cruz de hierro y diversas fotografías.
Pero la lista de objetos no termina ahí.
La destrucción de las armas
Esta petición cursada por el líder del FAS, a juicio de la Acció Popular Contra l’Impunitat (APCI), que ejerce la acusación popular contra los nazis, tiene una doble intencionalidad. “No descartamos que la intención última sea que los ultras planeen acceder a una indemnización por parte de la Administración de Justicia. La razón no es otra que según el Tribunal las armas fueron destruidas por la Guardia Civil con la autorización del TSJ valenciano fechas antes de la celebración del juicio, y esa fue la justificación o la razón del Tribunal juzgador para que este arsenal no pudiera ser expuesto como piezas de convicción durante la celebración de la vista y que por tanto los medios de comunicación no pudieran difundir la imagen de los acusados y sus armas”.
Publicidad
La acusación popular entiende que “si se les devuelven las armas habrá un problema, y si no se les devuelve y reclaman una indemnización tendremos otro.
Por lo tanto en este sentido la acusación popular entiende que “si se les devuelven las armas habrá un problema, y si no se les devuelve y reclaman una indemnización tendremos otro. El primero porque si se les devuelven las armas alguien habrá mentido en documento oficial acerca de la destrucción del arsenal, y si ahora les pagan por la destrucción de las armas la Administración de Justicia tendrá un problema para explicarlo”.
Publicidad
Vínculos con otras bandas
La investigación realizada por la Guardia Civil sobre los nazis valencianos, iniciada a principios de 2004, acreditó las vinculaciones directas del FAS con otras bandas criminales de la misma ideología desarticuladas meses atrás.
En poder de los detenidos fueron halladas diversas armas, entre ellas pistolas, puños americanos, porras extensibles, sprays, además de propaganda nazi conde incitación a la violencia
Publicidad
En poder de los detenidos fueron halladas diversas armas, entre ellas pistolas, puños americanos, porras extensibles, sprays, además de propaganda nazi conde incitación a la violencia, el odio racial, y contaba con claras vinculaciones internacionales con seis países de la Unión Europea (Francia, Italia, Alemania, Portugal, Hungría y Reino Unido) y con grupos análogos de los Estados Unidos. Los puños americanos incautados a los miembros de Blood & Honour en Zaragoza habían sido comprados a través de la web montada por los nazis de FAS desarticulada en la Operación Pánzer, como acreditaron las conversaciones telefónicas realizadas.
Derecho de rectificación
En ejercicio del derecho de rectificación, José Antonio Andrés Orts, ha dirigido a Público un escrito afirmando lo siguiente: