"Muévete por tu salud": manifestaciones de las mareas frente al deterioro "extremo" de la sanidad pública en Andalucía

Las mareas han convocado para este fin de semana, en las ocho provincias andaluzas, manifestaciones frente al deterioro sin fin de la sanidad pública. En Cádiz será este sábado y en el resto el domingo. El lema elegido para la protesta es Muévete por tu salud. 

Estas protestas llegan en un momento caliente, justo cuando un juez acaba de citar a declarar a la gerente actual del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Valle García y a los exgerentes, Diego Vargas y Miguel Ángel Guzmán y, tras una denuncia del PSOE, que considera que pudieron cometer delitos de prevaricación por las prórrogas de los contratos a dedo efectuados durante la pandemia.

Las elevadas listas de espera, que el Gobierno andaluz de Juan Manuel Moreno Bonilla (PP) no ha logrado reducir, y las demoras asistenciales en los centros de salud suponen una "irresponsabilidad" y "una mala gestión" para las mareas.

"No podemos dejar de mostrar nuestra indignación más elevada y nuestro rechazo a la situación", señala la Marea en un comunicado. La plataforma exige entre otras cuestiones "medidas de reforzamiento de la sanidad pública, el cese de los trasvases presupuestarios del dinero público a la sanidad privada, el aumento de plantillas en los centros de salud y servicios hospitalarios y un papel activo de la ciudadanía en todo este proceso que se está dando como consecuencia de la grave irresponsabilidad en la gestión del gobierno Moreno Bonilla".

Una estrategia diseñada

Las mareas consideran que no se trata de "errores puntuales en la gestión, sino que se trata de una estrategia bien diseñada que pasa, en primer lugar, por deteriorar la sanidad pública —principalmente la atención primaria de salud— y cronificar las listas de espera, para que todo ello permita la expansión de la sanidad privada".

Es una estrategia "conducente a generar una reconversión sanitaria que dé lugar a un modelo de servicios sanitarios dual donde una sanidad pública empobrecida, saturada y deteriorada atenderá a la gente mayor, a las personas con enfermedades crónicas complicadas o con antecedentes oncológicos, pluripatológicos o cardiovasculares", exponen las mareas en un comunicado.

"Pacientes —agregan— todos ellos que, sabido es, no los quiere la sanidad privada porque les resulta de un coste excesivo para sus cálculos de beneficios. Y una sanidad privada, empresas muchas de ellas multinacionales, que va aumentando sus negocios, sus pólizas y sus infraestructuras, incrementando su expansión a costa del dinero público, bajo el farisaico lema de colaboración público privada, que no es otra cosa que una clara parasitación del presupuesto público para el beneficio privado".

En el próximo presupuesto prosigue el incremento en el trasvase de fondos. El Gobierno de Moreno Bonilla ha previsto un aumento del 21,5% del presupuesto para conciertos sanitarios. Esta cifra está muy por encima del incremento global de las cuentas, que se sitúa en el 4,4% y también del presupuesto completo de salud, que crece un 6,9% respecto a 2024. No es nuevo esto en Andalucía. Con el PSOE ya pasaba, pero el PP, poco a poco, va aumentado las derivaciones.

El deterioro de la sanidad es un asunto que cala entre la ciudadanía, según revelan los sondeos de la propia Junta de Andalucía. Es el segundo problema que más preocupa a los andaluces, solo por detrás del endémico paro. El estado del sistema sanitario fue un factor muy relevante para la llegada al poder del PP en la Comunidad Autónoma, tras 37 años de Gobiernos del PSOE.

Después de casi seis años de gabinetes de Moreno Bonilla la preocupación ha superado a la que existía por este asunto cuando el PP llegó al Ejecutivo, tras las elecciones de diciembre de 2018. La crisis del sistema ha llevado al presidente a acometer desde que gobierna varios cambios en el organigrama y no solo en cuadros intermedios. Baste un dato: en seis años de presidencia, Moreno Bonilla, muy poco amigo de las crisis de Gobierno y defensor de la estabilidad, ha tenido tres personas diferentes al frente de la consejería de Salud: Jesús Aguirre, Catalina García y ahora Rocío Hernández.