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Podemos mantiene el "no" a Sánchez y pide que "se atreva a ser presidente" con su apoyo a partir del 5 de marzo

Puertas giratorias, anchoas y buñuelos

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El líder de Podemos, Pablo Iglesias (d), y el portavoz parlamentario del partido, Íñigo Errejón (i), en sus escaños durante la primera jornada de la sesión de su investidura, en la tarde del martes en el Congreso de los Diputados. EFE/Javier Lizón

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MADRID.- Podemos, En Marea, En Comú Podem y Compromís no han modificado un ápice su postura después de haber escuchado la intervención de Pedro Sánchez en el debate de investidura: "no" a una serie de vaguedades que pretenden "hacer una cosa y la contraria" -contentar al PP y a Podemos-; y "no", por tanto, a la investidura del candidato socialista a la Presidencia del Gobierno. Al menos, han subrayado las cuatro formaciones, hasta la semana que viene, cuando tras el fracaso "anunciado" de ésta, el PSOE "reconsidere" su estrategia y acepte pactar con los grupos de izquierda (Podemos y sus confluencias, Compromís e IU-UP)

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Doménech ha criticado a Sánchez que "la referencia más importante" a Catalunya haya sido una alusión a la "alta cocina"

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Para el portavoz parlamentario de la formación morada, el discurso de 96 minutos "no ha tenido nada que ver con un proyecto de Gobierno", si no que se ha tratado de "un conjunto de frases vaporososas y de buenas intenciones". "Ya que Sánchez intentaba jugar a ser presidente por una día, esperábamos alguna propuesta", ha confesado.

Puertas giratorias, anchoas y buñuelos

También ha replicado el portavoz de En Comú Podem al candidato socialista que un "Gobierno del bien común no es un gobierno con el Ibex 35, donde no se mencionen las puertas giratorias, ni se reforme realmente el artículo 135 de la Constitución".

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El portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví. EFE

En la misma línea, el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, ha reprochado al líder del PSOE que haya apelado al "mestizaje ideológico" entre partidos que son "incompatibles" y no haya intentado acercarse "a la gente que podía ser más cercana o más afín". "Yo no mezclaría una anchoa con un buñuelo", ha ironizado, tachando de "previsible" y "decepcionante" el discurso de Sánchez.

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