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IU interviene mañana la federación de Madrid para zanjar la guerra

Significa esto no solo que los militantes de la organización territorial que deseen continuar en IU tendrán que solicitarlo sino que también podrán volver los que se han marchado, como Mauricio Valiente o Jorge García Castaño

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El coordinador general de IU, Cayo Lara, durante la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso de los Diputados. EFE/Juan Carlos Hidalgo

MADRID.- Izquierda Unida quiere zanjar ya la guerra con Madrid, que arrastra desde hace meses por el incumplimiento de varias resoluciones de la dirección y se da por hecho que mañana probablemente rompa con esta federación, cuyos militantes, si quieren, tendrán que volver a solicitar la afiliación a IU.

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Significa esto no solo que los militantes de la organización territorial que deseen continuar en IU tendrán que solicitarlo sino que también podrán volver los que se han marchado, como Mauricio Valiente o Jorge García Castaño, que se integraron en la candidatura de Manuela Carmena tras su desencuentro con la dirección autonómica.

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Fue el coordinador de Presidencia, José Luis Centella, quien planteó afrontar de una vez esta crisis enquistada, algo que venía reclamando desde hace tiempo sobre todo desde el entorno del candidato al Gobierno, Alberto Garzón, y consiguió para ello el apoyo mayoritario de la Presidencia federal hace diez días.

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Parte de la militancia está muy enfadada con la decisión de ser "desvinculados"

Otro de los aspectos que hay que considerar, es qué hacer con la enorme deuda que acumula Madrid, de casi dos millones de euros con Hacienda y la Seguridad Social, más otro millón con proveedores, aunque es bastante probable que IU tenga que asumirla y, de hecho, prácticamente cuentan con ello.

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La federación de Madrid, con unos 5.000 militantes, mantiene un pulso con la dirección desde octubre pasado, provocado por el incumplimiento de las resoluciones que exigían el cese de los portavoces de la Asamblea y el Ayuntamiento de Madrid, Gregorio Gordo y Ángel Pérez, señalados como responsables políticos del escándalo de Caja Madrid y las tarjetas opacas.


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No reconocer la lista a la capital que encabezó Raquel López por considerar que no cumplía todos los requisitos establecidos por la dirección federal fue un paso más en esta brecha, que ha culminado con un resultado electoral que, por primera vez desde su fundación en 1986, deja a IU fuera de las instituciones madrileñas.

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