'El Hormiguero' y el machismo en la ciencia

Con motivo del día internacional para la eliminación de la violencia contra las mujeres del 25N, el Ministerio de Igualdad lanzó un vídeo para concienciar sobre la normalización de las violencias machistas en la sociedad.

Bajo el lema "¿Entonces quién?", la campaña se dirigía por primera vez a los hombres como causantes de estas violencias, y se preguntaba por su papel en la lucha contra el machismo. Además, pone el foco en cómo se normalizan comportamientos machistas por parte de streamers, presentadores o futbolistas. 

El spot, que acumula casi tres millones de visualizaciones, ha provocado la reacción del streamer Xokas, que se ha visto reflejado en el fragmento del amigo que sólo bebe zumos y siempre pilla cacho con chicas borrachas. El streamer, a través de su plataforma en Twitch, donde suma más de un millón de seguidores, había relatado el pasado mes de abril una situación similar.  

Tras la publicación del vídeo del Ministerio de Igualdad, el streamer se ha dado por aludido, y ha dicho que emprenderá las acciones legales necesarias porque nunca ha dicho tal cosa en su vida. A pesar de ello siguió defendiendo que su amigo era un crack por ligar con chicas colocadas. 

Otro que se ha sentido identificado en el vídeo ha sido el presentador de El Hormiguero, Pablo Motos, que ha reaccionado dedicando diez minutos de su programa para atacar al Ministerio de Igualdad en prime time. Motos ha aludido a la escena del spot en la que un presentador pregunta a la invitada del programa si prefiere dormir con ropa sexi o cómoda. Y es que, cuando la actriz Elsa Pataky visitó el plató de El Hormiguero en 2016, Motos le planteó exactamente la misma cuestión. 

Por mucho que Motos trate de justificar sus comentarios machistas a Pataky, no se trata de un caso aislado, y son incontables los momentos machistas que ha protagonizado el presentador en los últimos años.

Esto es algo que se han encargado de recordar los usuarios en redes sociales, que han rescatado algunos de ellos, sorteando la censura. Y es que Atresmedia, el grupo mediático al que pertenece El Hormiguero, ha eliminado los programas con los momentos más escandalosos de su plataforma Atremedia Player y ya no están disponibles. Además, también se están tumbando los tweets con capturas de momentos machistas del programa.

Nuestro compañero Rubén Hood ha denunciado que la empresa de Pablo Motos, 7 y acción SL, está deshabilitando vídeos con la excusa del copyright. En los tweets que ahora aparece el siguiente mensaje: "Este contenido multimedia se desactivó en respuesta a una denuncia del titular de los derechos de autor". Esto ha ocurrido en numerosas cuentas que habían compartido vídeos de comportamientos machistas de Motos, como la de Pablo Echenique o Juanma del Olmo. 

Para terminar, quería hacer una reflexión sobre la influencia política que tienen los programas de entretenimiento como El Hormiguero. Como señalaba muy acertadamente el escritor y crítico de televisión Bob Pop, "cometemos el error de llamar a todo esto entretenimiento, porque el entretenimiento nos da la sensación de ser algo inocuo, y no lo es, porque en realidad perpetúa modelos de juicio tremendamente rancios, retrógrados y decimonónicos".

Esto es algo que también señalaba el pensador marxista Slavoj Zizek, "la lucha por la hegemonía ideológico–política es siempre una lucha por la apropiación de aquello que es vivido espontáneamente como apolítico".

Cuando desde El Hormiguero se objetualiza a las invitadas, ignorando sistemáticamente su trayectoria profesional y subordinándolas al deseo masculino, se están reproduciendo los marcos machistas y la ideología patriarcal. Pero el machismo no es el único marco reaccionario que perpetúa el programa de El Hormiguero.

Cuando Pablo Motos, desde un programa de entretenimiento de altos índices de audiencia, en junio cerró la temporada con un 16% de cuota de pantalla y 2,4 millones de espectadores de media, bueno, cuando desde un programa con estos niveles de audiencia, se entrevista al líder de Vox Santiago Abascal, presentándolo como un hombre bueno y cercano, se está contribuyendo a la normalización de la extrema derecha. 

Cuando Pablo Motos, desde un programa de entretenimiento señaló a Pablo Iglesias como casta por comprarte una casa, hizo más daño a Podemos, y contribuyó más a instalar el marco del "casoplón" que todas las mesas de tertulias juntas. 

Y quería terminar con otra cosa que a mi me molesta especialmente, porque sé de primera mano las dificultades que tenemos las mujeres para abrirnos paso en un ámbito muy masculinizado como es la ciencia.

Cuando en el programa de las hormigas son siempre hombres los encargados de hacer experimentos "científicos", mientras se relega a las mujeres al papel de espectadoras asombradas con sus hazañas, se refuerzan los roles de género y la idea de que las mujeres no podemos tener una carrera científica.

Esto es especialmente grave teniendo en cuenta que según la UNESCO la brecha de género en la ciencia es enorme: sólo el 28% de los puestos científicos de investigadores son ocupados por mujeres. Además, de la enorme desigualdad que supone excluir a las mujeres de la producción de conocimiento científico, esto tiene consecuencias directas sobre qué se investiga y cómo se investiga, es decir, sobre el tipo de conocimiento que se produce. Es importante señalar, que, como ocurre en otros campos de conocimiento, o quizás aún más por esta brecha de género que comentábamos, existe un sesgo machista en la ciencia.

Esta prevalencia de la mirada masculina es lo que se conoce como androcentrismo. Y esto tiene consecuencias directas sobre la vida de las mujeres: no hay prácticamente investigaciones sobre la menstruación y sus dolencias; los medicamentos salen al mercado sin haberse testado en mujeres (un ejemplo reciente es el impacto no previsto que ha tenido la vacuna del covid sobre los ciclos menstruales); y si preguntamos en la calle sobre los síntomas de un infarto, el 90% de la gente nos responderá con los síntomas que tendría un hombre en caso de infarto, dolor en el pecho y en el brazo izquierdo, muy diferentes a los que tendría una mujer.

Pero para terminar con una nota de optimismo, siempre hay mujeres que vencen todos los obstáculos y llegan muy lejos. Desde aquí un saludo y nuestro reconocimiento a la biotecnóloga Sara García Alonso, que ha sido seleccionada por la Agencia Espacial Europea para viajar al espacio. Sara García tiene una media de 9,7 en su currículum, lidera un proyecto de oncología en el laboratorio de Mariano Barbacid, uno de los oncólogos españoles más prestigiosos del mundo, y uno de sus trabajos más recientes ha desvelado la estructura de la proteína RAF1, un paso clave para crear terapias contra el cáncer de pulmón.

Además, la futura astronauta ha reconocido la importancia que ha tenido la educación pública para llegar donde ha llegado: "Yo he estudiado siempre en la pública, con financiación pública, y poder devolver de alguna manera a mi país la inversión es un orgullo para mí", ha dicho.