La Guardia Civil se ha personado este martes en la sede central del servicio de emergencias 112 de la Generalitat, en Reus (Tarragona), en búsqueda de pruebas sobre la jornada del referéndum del 1 de octubre.

Fuentes del Instituto Armado han explicado que la personación en el edificio se ha hecho con orden judicial para investigar cruces de llamadas relacionadas con la consulta del 1-O. El juez mantiene un procedimiento abierto sobre el papel de los Mossos d'Esquadra en esta demarcación durante el 1-O.

La sede del teléfono de emergencias del 112 que la Generalitat tiene en Reus centraliza llamadas urgentes de los servicios de emergencia y almacena las conversaciones de los Mossos y los Bomberos de la Generalitat, además de Protección Civil, Sistema de Emergencias Médicas y 112. En el caso de los Mossos, el edificio concentra los ficheros de los servicios policiales relativos a las demarcaciones de las Tierras del Ebro y de Tarragona.

Hasta allí se han desplazado una decena de guardias civiles. En concreto, los agentes buscaban las grabaciones de las conversaciones de los Mossos el pasado 1 de octubre, así como las instrucciones que daban por el servicio interno de comunicaciones de radio. 

El juez ha ordenado estas diligencias para averiguar, entre otros aspectos, si los Mossos "tuvieron una actitud pasiva a la hora de cumplir la resolución judicial que les obligaba a impedir la votación y si hicieron un seguimiento de las intervenciones que efectuaron la Guardia Civil y la Policía Nacional para cumplir con el mandato judicial", según las fuentes. Los agentes han llegado hacia las 10.00 horas, han completado su diligencia y han abandonado hacia las 11.30 horas el edificio de la sede central del 112, dependiente de la consellería de Interior.

La investigación del juzgado de Gandesa sobre el operativo llevado a cabo por los Mossos d'Esquadra durante el 1-O discurre de forma paralela a la que está abierta en la Audiencia Nacional ─donde este lunes la juez Carmen Lamela retiró el pasaporte al mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, acusado de sedición─ y en el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC).

Precisamente, los Mossos han notificado a la magistrada del alto tribunal catalán Mercedes Armas, que instruye una causa contra el gobierno catalán por el 1-O, que han abierto una investigación interna para determinar si algún agente, a título personal, no siguió las instrucciones que se habían trasmitido para impedir la votación.