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Gobierno y Generalitat concretan el blindaje del catalán pero siguen sin aterrizar la desjudicialización del conflicto 

La reunión de la mesa de diálogo celebrada este martes se salda con dos acuerdos: uno para comprometerse a resolver los conflictos políticos a través del diálogo, sin concreciones; y otro para blindar e impulsar la lengua catalana.

El ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, comparece tras una reunión del Consejo de Ministros, en La Moncloa, a 11 de enero de 2022, en Madrid.
El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, en una imagen de archivo. Europa Press

La reunión de la mesa de diálogo celebrada este miércoles entre el Gobierno de España y el Govern de la Generalitat de Catalunya se ha saldado con dos acuerdos, aunque uno más concreto y "aterrizado" que otro. Ambas partes se han comprometido, por un lado, a avanzar en la desjudicialización del conflicto político (sin medidas ni compromisos concretos a corto plazo), y, por otro lado, a blindar y proteger la lengua catalana a través de una serie de medidas desplegadas a diferentes niveles.

La reunión, que ha comenzado a las 10.00 horas, ha durado casi dos horas, aunque desde el Gobierno se explica que los dos equipos llevan bastante tiempo trabajando los asuntos que finalmente se han traído a la mesa de negociación.

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que es el dirigente que ha encabezado la delegación del Ejecutivo estatal, ha sido el encargado de explicar el desarrollo de este encuentro (el tercero desde que se acordó constituir la mesa de diálogo entre Gobierno y Generalitat) y los acuerdos alcanzados.

En el asunto que más se ha avanzado ha sido en el blindaje e impulso del catalán, que, como ya avanzó Público, estaba bastante cerrado antes de la reunión de este martes. Ambas partes han acordado dotar a los centros educativos catalanes de autonomía para reforzar el catalán o el castellano en función de "las realidades y el entorno social y cultural" en el que esté ubicado cada centro, ha explicado Bolaños.

El ministro de la Presidencia ha mostrado el respaldo del Gobierno de España a la ley sobre el uso de lenguas oficiales en la escuela aprobada en el Parlament de Catalunya y, de hecho, el acuerdo sobre la autonomía de los centros para reforzar una u otra lengua en función del entorno sociocultural se acogería a la literalidad  de esta norma. "Es un ejemplo de gran acuerdo de mayorías y una ley perfectamente adecuada a la Constitución Española", ha defendido Bolaños.

En el ámbito internacional, el Ejecutivo de Pedro Sánchez va a solicitar al Parlamento Europeo el reconocimiento del catalán como lengua de uso en las sesiones plenarias, así como que se facilite la presencia de representantes de la Generalitat en todos los foros internacionales donde se traten políticas lingüísticas.

Uso del catalán en el Senado y en el Parlamento Europeo

A nivel estatal, también se ha acordado que se pueda utilizar la lengua catalana en el Senado, la Cámara Territorial del Estado, en principio en todas las situaciones (en la actualidad el uso de las denominadas lenguas cooficiales solo se permite en los debates de mociones, pero no en el resto de debates del Senado).

A diferencia del blindaje e impulso del catalán, donde siguen sin aterrizarse los acuerdos es en el asunto de la desjudicialización de la política y las eventuales medidas para relajar la presión de los tribunales sobre los dirigentes catalanes que tienen causas judiciales pendientes derivadas del procés.

El ministro de la Presidencia ha explicado que el 'acuerdo' (sin medidas concretas) para avanzar en este asunto se basa en tres principios. El primero es que "la actividad política e institucional debe llevarse a cabo dentro del ordenamiento democrático vigente; la eventual mejora del marco normativo se ha de producir a través del dialogo".

El segundo, es que los futuros pactos en materia de desjudicialización del conflicto político "han de ser representativos de mayorías amplias y transversales, de manera que puedan garantizar la seguridad jurídica con grandes mayorías que superen los bloques. Nunca más el enfrentamiento estéril", ha defendido Bolaños.

Sin acuerdo sobre el delito de sedición

El tercer principio es que "las instituciones públicas han de preservar en todo momento el interés general". En la mesa de diálogo de este martes no se ha alcanzado ningún acuerdo concreto ni para estudiar una eventual amnistía a los dirigentes políticos encausados, ni para reformar el delito de sedición a través de la modificación del Código Penal.

El ministro de la Presidencia ha defendido en este sentido que el Gobierno está dispuesto a armonizar la legislación española con las mejores legislaciones europeas", pero ha insistido en que para eso se precisa de una mayoría parlamentaria "que hoy no existe".

"La mayoría parlamentaria se tiene que construir en base a un acuerdo, pero ese acuerdo no se ha abordado. Estamos dispuestos a armonizar legislación española con las mejores europeas, pero ahora esa mayoría no existe; si en el futuro existiera porque hay un acuerdo, pues lo veríamos", ha concluido.

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