Franco: un dictador fascistoide, con tendencia a lo nazi, que salió de la Guerra con 34 millones de pesetas
¿A qué destino Franco el dinero?
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MADRID.- Franco fue un dictador fascistizado, con proclividad hacia lo nazi y se enriqueció, de manera inmoral, durante los tres años de Guerra Civil y el primer año de represión brutal. Esta es la conclusión que se extrae de la obra La otra cara del Caudillo (Crítica), que acaba de publicar el historiador Ángel Viñas. "Tratar a Franco como yo lo hago no es una cosa que se haga todos los días en la historiografía española...", señala Viñas a Público nada más comenzar la conversación telefónica desde su despacho en Bruselas que termina con la siguiente afirmación: "En términos jurídicos, Franco no fue un ladrón, pero sí en términos morales".
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En términos económicos, el general Franco entró a la Guerra Civil sin una peseta -la República le había retirado el sueldo por ser un general rebelde- y en 1940 tenía en su haber 34 millones de pesetas de fortuna personal (unos 388 millones de euros de hoy día según el método de conversión José Ángel Sánchez Asiaín.
"En términos jurídicos, Franco no fue un ladrón, pero sí en términos morales"
"Hay quién le gusta escribir o decir que Franco murió pobre y desamparado. Obviamente, no murió ni pobre ni desamparado aunque admito que no tenía muchos millones en sus cuentas corrientes. Lo que tenía era activos inmobiliarios y acciones en empresas a punta pala. Lo que a mi me importa es cómo llega a hacerse con la fortuna en tres años de guerra y uno de represión sangrienta. Eso trato de investigar", señala Ángel Viñas.
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Viñas señala en la obra que sus sospechas "apuntan hacia la posibilidad de que Franco se quedara con la mayor parte de los fondos acumulados"
¿A qué destino Franco el dinero?
Ángel Viñas señala en la obra que sus "sospechas apuntan hacia la posibilidad de que [el dictador] se quedara con la mayor parte de los fondos acumulados". "De poder demostrarse sin demasiadas lagunas que no todos aquellos millones se distribuyeron entre al menos sus leales las consecuencias serían muy significativas: Franco se habría enriquecido esencialmente gracias al sacrificio y al esfuerzo de quienes, entusiasmados o a regañadientes, aportaron sus óbolos vía donativos a la Causa Nacional", escribe el autor.
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Franco como fuente de derecho
Por otro lado, Viñas destaca a lo largo de la obra que la palabra del dictador era ley y que, por tanto, Franco era fuente de Derecho. El dictador podía levantarse una mañana y dictar una disposición secreta que pasaba a formar parte de las leyes del país pese a no ser publicada en el Boletín Oficial del Estado. Unas disposiciones secretas que, como señala el historiador, incidieron en las más variadas políticas: "Seudoconstitucionales, generales, económicas, represivas y militares".
"Presentar al franquismo en plan de régimen autoritario resulta, en mi humilde opinión, demasiado corto, diga lo que quiera don Mariano Rajoy"
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De esta manera, Viñas habla de la apropiación por parte de Franco del concepto Führerprinzip, procedente del nazismo, que viene a decir que la voluntad del jefe es fuente de Derecho. "El Caudillo, como el Führer, fue y permaneció hasta su muerte fuente suprema del Derecho. No lo digo yo. Lo esculpió la Ley Orgánica del Estado que cualquiera puede leer fácilmente en la red y de cuyo texto no todos extraen las consecuencias que se imponen", escribe Viñas.