Felipe González confía en la inocencia de Griñán y asegura que volvería a elegirle como ministro de su Gobierno

El expresidente Felipe González mantiene su confianza en el expresidente andaluz José Antonio Griñán, por lo que si hoy presidiera el Gobierno, lo volvería a designar miembro de su Gabinete, ya que considera "imposible" que sea culpable de un delito de malversación de fondos públicos.

El Tribunal Supremo, el pasado 26 de julio, ratificó la sentencia que condenaba a Griñán a seis años de cárcel por malversación de caudales públicos y prevaricación durante su etapa como consejero de Economía, entre 2004 y 2009. En un escrito, González alude a su compromiso con la Constitución, que le lleva a acatar las decisiones de los tribunales, particularmente las del Tribunal Supremo.

González destaca de Griñán su "vocación de servicio público" "intachable integridad moral"

Indica que el fallo, "sin que se haya dictado sentencia", le llena de "perplejidad y dolor" desde que se enteró y, sin conocer los argumentos que llevan a tres de los cinco miembros del Tribunal a condenar a Griñan, pero conociéndole "a fondo", manifiesta que "si pudiera designarlo hoy para formar parte de un Gobierno de España que yo presidiera, lo volvería a hacer".

González precisa que lo haría "por su competencia y capacidad intelectual", así como por "su vocación de servicio público durante toda su vida para mejorar la vida de la mayoría y fomentar la convivencia en democracia y libertad" y "por su intachable integridad moral".

"Desde el conocimiento de la persona", le lleva a considerar "imposible que sea considerado culpable de un delito de malversación y, por tanto, ve "injusto" que "sea condenado a pena de prisión por ello". Y agrega que cuando se conozcan los fundamentos de la sentencia, se pronunciará "respetuosamente" sobre ellos.

La portavoz del PSOE, Pilar Alegría, ya reivindicó la "honestidad" tanto de Griñán como de su predecesor en la Junta, Manuel Chaves, e incidió en que ninguno de ellos se había quedado "ni un céntimo" de los fondos públicos.

También el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, sostuvo que en este caso "están pagando justos por pecadores", afectando a un asunto en el que "no hubo enriquecimiento personal" y en cambio "sí que hubo dimisiones hace más de un lustro asumiendo sus responsabilidades políticas", según remarcó.