La exdiputada de la CUP en el Parlament Anna Gabriel ha comparecido este martes voluntariamente ante el Tribunal Supremo, tras exiliarse en Suiza en febrero del 2018. Acompañada de su nuevo abogado, Íñigo Iruín, que también acompañó el regreso del exconsellera Meritxell Serret, Gabriel ha decidido volver al Estado español y ponerse a disposición de la justicia.

Próximamente será citada a declarar ante el resto de partes personadas por un delito de desobediencia, que no comporta prisión. Ha quedado por tanto en libertad a la espera de proseguir el procedimiento judicial, según la interlocutoria dictada por el juez Pablo Llarena.

Gabriel lleva residiendo en Suiza cuatro años y trabaja y es dirigente de un sindicato de este país, al cual de momento tiene previsto regresar a la espera de la nueva citación judicial. El juez no ha tomado medidas cautelares contra ella que la impidan salir del Estado español.

Gabriel asegura que se vuelve a Suiza “por coherencia con las responsabilidades profesionales adquiridas”

La ex diputada de la CUP ha explicado a través de un comunicado que, de momento, seguirá viviendo y trabajando desde Suiza "en coherencia con una serie de responsabilidades profesionales y personales adquiridas". Y es que, desde noviembre pasado, ejerce de secretaria general del sindicato UNIA en el cantón de Ginebra. De hecho, Gabriel ya ha regresado hoy mismo a Suiza después de comparecer voluntariamente y por sorpresa ante el Tribunal Supremo.

Será citada próximamente a declarar por desobediencia y quedará en libertad. "Después de cuatro años y medio de exilio, hoy se produce un paso procesal necesario para recuperar una libertad de movimientos que nunca hubiera tenido que perder, ni yo ni nadie", argumentó Gabriel.

En el comunicado enviado a través del grupo de apoyo Free Gabriel, la ex diputada de la CUP en Suiza desde febrero de 2018 dice que el paso de hoy responde a "una serie de consideraciones, reflexiones y análisis que tienen que ver tanto con el contexto político y judicial general, así como con una serie de circunstancias personales".

A pesar de la decisión de quedarse de momento en Ginebra, Gabriel ha querido dejar claro que sus compromisos políticos y sociales "permanecen dónde estaban, con mi pueblo, con su gente, y muy especialmente, con el conjunto de las personas represaliadas"

Se suspende el estado de rebeldía y la orden de detención

Según una nota del Tribunal Supremo, Gabriel fue procesada en marzo del 2018 con ocasión del procedimiento penal que se sigue ante el Tribunal Supremo por su posible implicación en la declaración unilateral de independencia de Catalunya.

La investigada fue declarada en rebeldía el 9 de julio de 2018. Con la comparecencia de este martes, el juez Llarena decreta la suspensión del estado de rebeldía y anula la orden de detención. Únicamente ha exigido una dirección y teléfono para poder proceder a la futura citación.

La procesada ha comparecido con el fin de ponerse a disposición del Supremo y regularizar su situación procesal de rebeldía, asegura la nota. Anna Gabriel fue investigada como presunta autora de un delito de desobediencia, sin que existiera contra ella ninguna orden europea o internacional de detención. El delito que se le atribuye no comporta pena de prisión sino una multa de hasta doce meses y una pena de inhabilitación para empleo o cargo público de hasta dos años de duración.

Sin embargo, existía una orden nacional de detención para que fuera puesta a disposición del Supremo y se le pudiera recibir declaración, ante la imposibilidad legal de continuar el procedimiento contra ella sin haber practicado previa declaración indagatoria. Orden que ahora ha sido anulada.