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titulares al banquillo

"Ecoterroristas": criminalización mediática de la protesta ecologista

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madrid,

Mientras los medios financiados por las grandes empresas energéticas nos muestran los photocall de la cumbre del clima patrocinada por Coca Cola y blanquean a la dictadura genocida egipcia que ejerce de anfitriona, criminalizan abiertamente a quienes protestan para que se tomen medidas reales frente a la destrucción del medioambiente.

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A raíz de la acción de este sábado en el Museo del Prado en Madrid, donde dos activistas hicieron una performance para denunciar la inacción ante la crisis climática, este fin de semana la prensa libre se ha llenado de duras acusaciones y condenas contra estos jóvenes. Fijaos: diario ABC: "Atentan en el Prado contra 'Las Majas' de Goya, que no tienen cristal de protección". 

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Terroristas, efectivamente. Que encima se llaman "Futuro VegETAl", así que tienen la palabra "ETA" dentro de su nombre. Pero esperad que esto de que les llaman "terroristas" no es solo una paranoia nuestra que nos gusta sacarle punta a todo. Sigue el diario ABC: "Se veía venir. Era solo cuestión de saber qué día, a qué hora, en qué museo y cuál sería el cuadro elegido, pero los museos españoles, como los de todo el mundo, estaban en el punto de mira de los ecoactivistas, 'ecoterroristas' más bien".

Sí, "ecoterroristas" que ponen cosas en un "punto de mira". Ya veis que para ABC, "ecoterroristas" no son las grandes compañías que están destrozando las condiciones de vida en el planeta, ni los que volaron los gasoductos Nordstream, ni la elite de ricos que contamina más que la mitad de la humanidad: son los jóvenes de 18 años que protestan en defensa del planeta. Sigue ABC: "Desde que tienen lugar estos actos vandálicos en los museos, se ha instaurado en el museo un protocolo sobre cómo despegar a los ecodelincuentes de los marcos con disolvente. Según se aprecia en los vídeos, la vigilante de sala en ningún momento trata de impedir que los jóvenes continúen con el acto vandálico. Parece que el protocolo no lo permite, pues no son agentes del orden. No tiene competencias para emplear la fuerza. Quizás haya que cambiar dichos protocolos para proteger el patrimonio histórico-artístico en peligro". 

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Dos párrafos más que os dejo del ABC: "No solo se cerró la sala, sino todo el ala. El público se quedó sin poder admirar dos de las obras más queridas del museo. Comprensible, pues, el enfado que mostraban algunos visitantes contra estos ecodelincuentes. El mensaje +1,5º escrito en la pared por los ecodelincuentes tiene como objetivo «alertar sobre la subida de temperatura mundial que provocará un clima inestable y graves consecuencias en todo el planeta». Pero da la casualidad de que el Prado realizó en 2019 una campaña con WWF España para concienciar sobre el cambio climático. De ahí que se queden sin argumentos (si es que los tenían) quienes cometen estos ataques. No respetan ni a quienes comparten su causa". Parece que en el ABC piensan que era una protesta contra el Museo del Prado, en lugar de una protesta contra la elite capitalista y el poder político que se pone a su servicio usando el Prado como mera plataforma para darle visibilidad. Este es el nivel.

Diario El Mundo: "Detenidas dos periodistas por participar en la organización del acto vandálico en el Prado". "Las imágenes de las cámaras y los testimonios hacen pensar a los agentes que estaban implicadas con las activistas. Tras visualizar las imágenes de las cámaras de seguridad del museo y la toma de declaración de varios testigos, según han indicado las mismas fuentes, se ha podido comprobar que las dos detenidas también participaron en la organización del acto vandálico".

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Se le acaban los insultos a El Mundo. Aparte de la crítica puramente periodística, la verdad es que no es muy original esto de gente que no hace absolutamente nada ni protesta de ninguna manera pero que se dedica a criticar los métodos de lucha de los demás. Que es como: si tú haces algo también, entonces igual puedes decir que ese repertorio de protesta no lo compartes o que prefieres otro distinto, pero ponerse en contra de las protestas y las acciones de otros cuando uno nunca hace nada, en fin.

Me recuerda un poco, dicho sea de paso, a algunos periodistas que últimamente se autoerigen como ideólogos de la izquierda que jamás han militado en una organización política pero que se dedican todos los días a tuitear dando lecciones sobre lo que deberían hacer las organizaciones (que es básicamente disolverse, además). Que es como: "¿Pero tú qué haces, compañero: militas en algo, estás comprometido con algo, con alguna organización, con alguna causa política? ¿Qué es lo que aportas tú a la lucha colectiva, aparte de meter mierda todo el rato? Ah, que nada, ¿no? Pues eso". 

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Quiero dejaros para acabar dos piezas más. Primera: columna de Isaac Rosa en elDiario.es, refiriéndose precisamente a la noticia de ABC que comentábamos antes y que calificaba de "atentado" la protesta en el Museo del Prado. Titular: "Greta mal, las del museo mal, protestar contra el cambio climático siempre mal". Y dice el texto: "Conclusión: si protestas como Greta, haciendo huelga frente a tu instituto los viernes, viajando en tren a una cumbre y pronunciando discursos, mal. Si protestas como las activistas del Prado, que no causaron ningún daño pero consiguieron sobresaltarnos, mal también. Niñata una, terroristas otras. Inofensiva una, peligrosas otras. Todas mal. Tampoco es que esos mismos periódicos aplaudan cuando las activistas cortan carreteras, irrumpen en actos públicos, arrojan pintura en la puerta de una empresa o señalan una industria contaminante. En el mejor de los casos las ignoran, las invisibilizan. Todo mal. Conclusión: no protesten, niñas. O háganlo sin molestar, que nadie tiene la culpa del cambio climático: ni Las Majas de Goya, ni los turistas interrumpidos en su disfrute del museo, ni los conductores atascados por su inoportuna sentada en mitad de la calle, ni los gobernantes que ya se reúnen en cumbres para arreglarlo, ni las empresas que mira tú cómo se comprometen con reducir emisiones, plantar árboles y usar correo electrónico en vez de cartas de papel. No protesten, no hagan el ridículo, no cometan atentados". 

Y segunda pieza que os cito, de El Salto. Titular: "El Salto condena la inaceptable detención de las periodistas que cubrieron la protesta en el Prado". "Joanna Giménez i García ha pasado la noche bajo custodia policial en una comisaría en Madrid. Fue detenida durante la mañana de ayer, domingo 6 de noviembre, por agentes de la Policía Nacional que le imputan tres delitos: daños, daños contra el patrimonio histórico y alteración del orden público. Son los mismos cargos impuestos a otra persona que también fue arrestada ayer. Ambas son periodistas, se dedican a informar y eso es lo que hicieron: contar lo que sucedió el sábado 5 de noviembre en el Museo del Prado, cuando dos jóvenes del colectivo Futuro Vegetal llevaron a cabo una acción de protesta en una de las salas de la pinacoteca. Giménez i García cubrió la protesta para El Salto. Las condenas por los delitos de daños al patrimonio histórico y alteración de orden público son de seis meses a tres años de prisión o multa de doce a veinticuatro meses cada uno". El Salto también recuerda otros casos de persecución y agresiones contra periodistas por cubrir protestas, como las que sucedieron contra quienes cubrieron las protestas vecinales contra el mitin de Vox en Vallecas en 2021, y acaba diciendo que "Más allá de la evidente necesidad de que estas prácticas censoras sean denunciadas y abolidas, y más allá también de una defensa corporativa del periodismo, la preocupación y lo que enciende todas las alarmas es la persecución del derecho a disentir en público, de expresar opiniones críticas con el estado de las cosas mediante acciones pacíficas de protesta. Si no se puede protestar, ni contar que se ha protestado, lo que se pretende es crear una sociedad obediente, muerta en vida". Por cierto, esta mañana, cuando preparábamos el programa, las dos periodistas detenidas, al igual que las activistas, continuaban metidas en un calabozo.

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