MADRID.- Los diputados del grupo parlamentario de ERC ocuparán en esta legislatura los escaños que acogían hasta ahora a los parlamentarios de Convergéncia Democràtica de Catalunya (CDC), aseguran fuentes parlamentarias fiables a Público. Desde 1977 los diputados de esta formación nacionalista han venido ocupando sistemáticamente las primeras filas del espacio central del hemiciclo convirtiéndose en una de las imágenes habituales entre las bancadas de la derecha y de la izquierda.

Esta será la primera consecuencia del hecho de que Convergència (rebautizado tras el 26-J como Partit Demòcrata Catalá ) no tenga un grupo parlamentario propio, un hecho sin precedentes en la Cámara baja desde la elección del primer parlamento democrático hace 29 años. Incluso en varias legislaturas llegó a ser el tercer grupo parlamentario más importante en el hemiciclo tras socialistas y populares.

Una segunda consecuencia de la decisión adoptada por la Mesa de la cámara este martes será la nueva ubicación de los diputados convergentes: les tocará ir al “gallinero” de las dos últimas filas, de las siete que tiene el hemiciclo, que son las que tradicionalmente acogen a los parlamentarios integrados en el grupo mixto. Es decir, Homs y sus compañeros se sentarán junto a los cuatro de Compromís, los dos de EH Bildu, los otros dos de UPN y los tres de Coalición Canaria, Nueva Canarias y Foro Asturias.

Ese será el cambio estético más llamativo que experimentará el hemiciclo. “Esta vez no se darán los problemas que hubo en la anterior legislatura, cuando se tuvo que cambiar el primer reparto de escaños tras relegar a Podemos al gallinero”, ha dicho a Público un miembro de la dirección de uno de los grupos ya conformados. La propia presidenta Pastor ha insistido en una breve comparecencia ante los periodistas que quiere evitar “los problemas de anteriores ocasiones”. Por esa razón se ha suspendido la reunión que iba a celebrar la Mesa en la tarde de este martes y trasladarla hasta la semana próxima para decidir sobre asuntos “ya cerrados entre todos”.

Otra de las cuestiones que quedan pendientes de decidir por parte de la Mesa es el reparto de recursos humanos –asistentes a cargo del presupuesto de la cámara– y las asignaciones económicas que corresponden a cada grupo parlamentario. En este capítulo la “reconversión” que sufrirá el grupo de diputados convergentes también será importante, junto a su protagonismo político que deberá diluir con el reto de partidos acogidos en el grupo mixto.