Exclusiva de Público
La corrupción del PP, la defensa de Villarejo en su lucha contra la imputación
Las cloacas de Interior De la 'peineta' de Bárcenas a los supuestos donantes del PP: las conexiones aún ocultas de la 'operación Kitchen' (III)
El comisario Carlos Salamanca, los hermanos Sánchez Lázaro y el chófer-espía de Bárcenas no fueron los únicos instrumentos para llegar al 'botín' del extesorero del PP. También una periodista fue usada como cebo para que la policía política pudiera hurtar documentos y audios a Bárcenas; un material hallado ahora en el registro a su exchófer y que también está entregando a cuenta gotas a la Audiencia Nacional el comisario Enrique García Castaño.
Publicidad
madrid,
Guerra en el PP de Madrid. Guerra entre los populares madrileños y los dirigentes nacionales. Guerra entre las dos mujeres que escoltan a Rajoy: la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sainz de Santamaría. Guerra, también, de Alberto Ruiz- Gallardón, que se veía ninguneado entre todos. Enero de 2013 se presentaba tenso y el número dos de la Policía, Eugenio Pino, era un hombre al que le gustaba que le resolvieran los problemas.
Publicidad
Por eso, cuando le dijeron que había una fuente que le podía dar toda la información sobre el extesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, y acabar pronto con el asunto, se frotó las manos. La dichosa fuente parecía que lo tenía todo. Así lo explicó Pino en la Audiencia Nacional a preguntas de su abogado, del despacho Illocad del que es propietario Baltasar Garzón, en una de sus comparecencias en la causa Kitchen, sobre el robo a Bárcenas de documentación clave sobre la financiación ilegal del PP, que nunca se puso a disposición de la justicia.
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Defensa: ¿Recuerda usted, señor Pino, que en el primer semestre de 2013 se generó cierta alarma por constantes informaciones de los medios por la posibilidad de que el señor Bárcenas tuviera testaferros, tuviera cuentas en terceras jurisdicciones, cuentas en paraísos fiscales? ¿Recuerda usted esa alarma social generada?
La Ley de Enjuiciamiento Criminal capacita a Policía y Guardia Civil para tener informantes, pero estos deben estar sometidos a un control, en el caso de que sean operaciones judiciales. En el caso de la operación Kitchen no existía ese control judicial. Los informantes también pueden ser más informales, pero lo que es raro es que se les llegue a pagar 48.000 euros de los fondos reservados y, presuntamente, se les ayude a conseguir un puesto como funcionarios de Policía. Que es exactamente lo que hizo Eugenio Pino con el exchófer de Bárcenas, Sergio Ríos Esgueva, a la sazón, espía de Bárcenas, a quien le pagaba en negro, según ha confesado, para que el conductor no perdiera la prestación de desempleo que estaba cobrando.
Publicidad
¿Qué cosas le ofrecían a Pino? Pues, por ejemplo, según asegura que confirmó con la UDEF en 2015, unas cuentas de Bárcenas y de su socio Javier Sánchez Lázaro que no tenían hasta el momento. Ese Sánchez Lázaro del que Bárcenas no se fiaba en 2013, como ya explicó Público en el primer capítulo de esta serie, y cuyo hermano Fernando recibió un préstamo de medio millón de euros del comisario Salamanca un mes antes de que la agencia Korpa —luego renombrada a Kometa— lograra seguir a Bárcenas hasta Canadá, meter a un redactor de un programa de Cuatro en su avión y rodearle hasta que el extesorero se vio tan atrapado que saludó con el famoso gesto de la peineta.
El mismo día en que se toma esa famosa foto, el 16 de enero de 2013, Público, al igual que muchos medios de comunicación, se hizo eco de las informaciones que desde la Policía o la Fiscalía filtraban sobre el escándalo del momento.
Publicidad
Así de claro lo explicó Pino en su declaración de enero de 2019, como se puede escuchar a continuación:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Eugenio Pino: Le salta esta investigación. Y automáticamente nos pone en contacto. El propio sistema, pero bueno, vuelvo a… a la UDEF se lo cuento yo. Al señor de la UDEF que se llama Vázquez [Manuel Vázquez, jefe de la UDEF en 2015] le digo estáis hablando y poco más de… Porque me sale, le sale Ángel Sanchís y me dice "sobre ese tenemos mucho, es un tío que fue tesorero del PP, tenemos muchos datos"… Digo: "¿Os sale Sánchez Lázaro [Javier]? De ese no sabemos nada. ¿Os sale un tal Fraga [Luis Fraga, sobrino de Manuel Fraga y junto a Javier y Bárcenas socio de Netcheck, empresa que sale en la cuenta de Suiza]? Sí, es un diputado. ¿Os sale una señora, que no me sale el nombre, que es muy rimbombante… y luego sale este, este y este…?". Y se lo digo, o sea, que hay una serie de datos y de informaciones que les llega. Es decir, es una labor de inteligencia y de apoyo hacia una investigación. No una investigación paralela, ya sabíamos quién tenía la titularidad de un juzgado y todos los policías asignados a ellos, esto era un apoyo que venía dado por un tío, perdone, por un señor que nos podía proporcionar datos a los polis que lo llevan… El auto de detención del juez Ruz dice que es consciente que hay muchas propiedades y muchos medios que pueden ser sustraídos…
Publicidad
Aunque se sostiene poco el argumento del exnúmero dos de la Policía, Eugenio Pino, fiscales y juez le siguen preguntando por esa oferta informativa que le hacían policías no asignados a la causa. Y, en concreto, el comisario Villarejo:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Fiscal: En la Operación Kitchen, como apoyo a la investigación sobre Bárcenas, ¿buscaban las cuentas de Suiza?
Publicidad
Sin embargo, según Pino, después de gastar fondos reservados, movilizar a media Comisaría General de Información y saltarse cantidad de protocolos internos y sin notificar nada al juzgado de la Audiencia Nacional que llevaba la causa, la llamada Operación Kitchen que él mismo encabezaba no consiguió ningún resultado, como explica a continuación:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Fiscal: Aunque parezca que no estamos hablando con un DAO, yo lo tendré que consentir. Mire, según la investigación, los controladores del Cuerpo Nacional de Policía habrían tenido acceso directo o indirecto —y fíjese cómo lo digo porque no le quiero confundir— a cuatro conjuntos documentales, o accedido a ellos o recuperados. Le voy a preguntar por cada uno de los cuatro, a ver qué sabe. ¿Sabe si el señor Villarejo obtuvo una copia de papeles fotocopiados por el conductor Sergio Ríos?
Publicidad
La verdadera 'operación Kitchen'
Sin embargo, las pruebas que se van acumulando en Kitchen —y que han motivado la apertura de una subpieza que está secreta dentro de esta investigación de la macrocausa Tándem— indican que tanto Villarejo como Gómez Gordo y García Castaño sí consiguieron que el chófer les diera lo que se había llevado de casa de los Bárcenas-Iglesias.
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Comisario Enrique García Castaño: Lo primero de todo que hacemos, aparte de comprobar dónde se mueve el señor Bárcenas, en qué entorno se movía el hijo [Willy Bárcenas], dónde iba la señora [Rosalía Iglesias], con quién se veía, la peluquería...
Publicidad
Lo cierto es que a base de mucho hablar, de 2.000 euros al mes y de la promesa, finalmente cumplida, de un puesto en la Policía, el comisario José Manuel Villarejo, con ayuda de Andy o Cospedín, es decir, de Andrés Gómez Gordo (el hombre de María Dolores de Cospedal en Castilla la Mancha desde que la conociera como consejera en la comunidad de Madrid), consiguieron que Sergio Ríos les fuera contando dónde podía estar la información que presuntamente guardaban los Bárcenas, como se escucha en una conversación entre Villarejo y el chófer de octubre de 2013:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Sergio Ríos: Y luego la gran equivocación que dice la señora, que se lo he contado a Andy también, Galeote, Trallero y Michavila le hicieron un medio pacto "—joé, que tú eres el corazón del partido"— para que dejara el escaño. Y de eso se arrepiente un montón porque dice que no estaría en la cárcel.
Publicidad
Chico listo, Sergio Ríos, tenía más que ofrecer. Le había echado el ojo a esos teléfonos que el amigo del extesorero experto en tecnología, Luis Fraga, había conseguido a Luis Bárcenas y Rosalía Iglesias para hablar, entre otros, con el entonces director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, como relata el chófer a Villarejo a continuación:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Sergio Ríos: Y antes cuando sacaban los teléfonos rojos alguna vez me ha llamado alguien, pero como no sabía quién era... Y me ha dicho: "Oye tienes que ir a tal sitio a recoger, que te están esperando". Pero todo eso está totalmente parado.
Publicidad
Pero la joya de la corona era otra: las presuntas grabaciones que Bárcenas se había llevado de Génova 13 gracias a que su cuñado era el director de Seguridad. Coincidían con los días en los que iban a pagar los empresarios en busca de obra u otro tipo de contrato con la administración pública; el cohecho que todavía se investiga en el juzgado de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional por el juez Santiago Pedraz.
Ese material, en una empresa como el grupo Cenyt del comisario Villarejo que se dedicaba a matar a sus clientes de "espanto" creándoles problemas donde no los tenía, era una mina de oro. Y el chófer también sabía dónde podía estar y así se lo transmitió al presunto superior de Cospedín, además de a los gestores con los que trabajaba Luis Bárcenas:
Publicidad
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Villarejo: Todo lo que sea recuperar esas grabaciones, recuperar los discos duros y tal, que él se defienda.
El confidente secreto de García Castaño que Pino no desvela
Como se desprende de la anterior conversación, mantenida entre Villarejo y Sergio Ríos a principios de 2013, ya ha habido una descarga —al menos de los teléfonos— un tiempo antes. Sin embargo, esa información parece que no llegaba a la DAO. Por eso, aunque todos bebían de la misma fuente (Sergio Ríos), el comisario Enrique García Castaño —un tanto aislado al no pertenecer al círculo de confianza de Cospedal y su esposo, Ignacio López del Hierro— busca otro confidente que introducir dentro del círculo de Bárcenas. Así lo explica Eugenio Pino en su declaración de enero de 2019 en la Audiencia Nacional, después de que le pongan un audio de la operación Kitchen de 25 de febrero de 2014, en el que Villarejo le está rindiendo cuentas:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Villarejo: Mira Eugenio, ¿qué tal? Te he llamado antes y me has dicho que estabas reunido, y le he dicho a Charo a ver qué día, si mañana te viene bien, y te comente unas cosillas. Pero dime más o menos a qué hora, bueno pues yo mañana me paso y te comento. Dos cosas que te quería decir; una, que me dice el cocinero que la señora lleva varios días reuniéndose con mucha gente, ahí en el despacho del abogado, sabes, y que además, ayer estuvo dos horas con Pedro J. eh, en su casa. Entonces a lo mejor no es malo, ¿te parece que le diga al Gordo [Enrique García Castaño] que mire unos diítas del despacho de este pavo? A ver quién está…
Sin embargo, diversas fuentes consultadas por Público señalan a una misma persona como el confidente secreto de García Castaño. En este caso, la confidente.
Marisa Gallero: una mujer, una confesión y un robo
El primer capítulo de esta serie de reportajes parte de la famosa 'peineta' que hizo Bárcenas a la prensa y que logró emitir el programa Te vas a enterar, de Cuatro, el 18 de enero de 2013. Pudo hacerlo ese programa gracias a las estrechas relaciones entre el dueño de la Agencia Korpa-Kometa, Álvaro García Pelayo, el empresario Fernando Sánchez Lázaro y el comisario del aeropuerto de Barajas Carlos Salamanca. La presunta 'confidente' del comisario Enrique García Castaño también provenía de Producciones Mandarina, responsable del programa que había conseguido meter a un reportero con cámara oculta en el vuelo Londres-Madrid que tomaría Bárcenas el 16 de enero de 2013 de regreso de Canadá. Su nombre: Marisa Gallero.
La periodista había sido directora de Las mañanas de Cuatro hasta que decidió cambiar el ritmo de Jesús Cintora y aliarse con Melchor Miralles, que había terminado su andadura en El Mundo para hacer grandes reportajes que vender a Mediaset. El primero iba a ser sobre Bárcenas. Y ella fue la baza que utilizó el comisario García Castaño a través de su amigo, el bregado periodista de investigación, para que la familia Bárcenas "derrotara", como se denomina a la confesión en el argot policial.
Letrado: Ha hecho usted referencia anteriormente a una serie de grabaciones, en concreto, me ha parecido entender, sobre el señor Rajoy. ¿Sabe algo de esas grabaciones? ¿Es cierto que usted tenía esas grabaciones? ¿Y qué ha pasado con esas grabaciones?
La periodista Marisa Gallero llegó al corazón de los Bárcenas poco a poco. Una vez obtenida la confesión del extesorero sobre los audios, Gallero puso en marcha un proyecto de documental, según ha sabido Público de fuentes relacionadas con el caso. Con el extesorero del PP ya en prisión y el verano entrado, pasó a ser directora del programa Te vas a enterar. Al mínimo roce provocado por un cámara, ella regalaba un elegante ramo a Rosalía Iglesias, triste y desolada con su marido dentro de la cárcel. Marisa Gallero se fue convirtiendo en un pilar en el que apoyarse entre tanto medio de comunicación acosador.
La fecha que fija Bárcenas como el día en que por primera vez confesó a alguien que había grabado al presidente del Gobierno y del PP, coincide con los nervios y la rivalidad entre los comisarios Gómez Gordo y García Castaño por quedarse con la operación Kitchen. Cuando en octubre de 2013 finalizó la emisión del programa, Marisa Gallero llegó al 'zulo' (el estudio de pintura de Rosalía Iglesias, donde escribió su libro — o eso insinúa García Castaño—), y también buceó por los secretos más profundos del matrimonio Bárcenas-Iglesias. Sin embargo, cuando García Castaño consiguió entrar en el 'zulo' para hacerse con el tesoro, se le habían adelantado, como relató en la Audiencia Nacional:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Juez: ¿Y dónde lo buscó?
El comisario García Castaño se enfada y coge a Sergio Ríos por banda. Ocurre antes de octubre de 2013, ya que Villarejo le recriminará al chófer haberle dado esta información al comisario de Información. Pero es que 'Big', apodo con el que Villarejo le señala en sus agendas, no soporta que el chófer rinda cuentas a Cospedín [Andrés Gómez Gordo] y a él. Y se cabrea, como explica a continuación:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
García Castaño: Y yo hablo con el 'controller' y le digo "tú me estás engañando, me estás vacilando, estás jugando conmigo. ¿Me quieres decir de dónde sacas estás cosas? ¿Dónde tiene este hombre estas cosas?". Y él vuelve a divagar, se pone nervioso y entonces me dice: "Tengo tres teléfonos que son del señor Bárcenas, que no tienen batería, que no tienen tarjeta". Y le digo: "¿Del señor Bárcenas son estos teléfonos? ¿Pero cómo tienes estos teléfonos? Tienes discos duros, tienes teléfonos, ¿tienes de todo? ¿cómo?". "Bueno, es que estaban guardados en un sitio y ahora los tengo que llevar a otro sitio"... "¿Pero en qué sitio estaban guardados?"... "Pues no lo sé, porque me los han dejado en una bolsa en casa de la señora con una bolsa...". "Pero cómo te lo van a dejar en casa de la señora con una bolsa...". Le digo: "Bueno, mañana me traes los tres teléfonos". Quedo con él en la calle Velázquez y me trae los teléfonos que, efectivamente, no tienen tarjeta y no tienen batería. Pido que me manden a un técnico, viene un chaval que es técnico y extraemos de los teléfonos lo que había en los teléfonos o supuestamente había en los teléfonos. Toda esa información que se extrae de los teléfonos inmediatamente la meto en un pendrive y se la doy al secretario de Estado.
García Castaño estaba mosqueado porque sabía, según cuenta en su declaración, que Andrés Gómez Gordo, 'Cospedín', se había hecho copia de los discos duros y se la había dado a María Dolores de Cospedal,según asegura en este audio:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Fiscal: Ahora le pregunto por si el comisario Gómez Gordo, entonces inspector jefe, en esas conversaciones le hiciera una clara referencia a que tenía que darle una información de la obtenida o que la secretaria general del Partido Popular fue receptora de parte de lo que se obtuvo, de documentos que se obtuvieron en Kitchen.
García Castaño no solo tenía como competidor a Cospedín. También tenía a Villarejo que, además, se había llevado "lo del zulo de la señora", anécdota de la que se jactó junto a su amigo José Luis Olivera en una comida en 2017:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
José Luis Olivera: ¡El hijo puta del Bárcenas!
La competitividad entre Villarejo y y el comisario García Castaño no terminó en el estudio de pintura de Rosalía Iglesias. En 2014, como señala Pino en su declaración, 'Big' tenía a "su confidente secreto" bien dentro de la familia Bárcenas y entonces Villarejo desplegó su red. Como en otros casos de denunciantes de corrupción, utilizó a Victoria Álvarez, la expareja de Jordi Pujol Ferrusola, para hacerse amiga de Marisa Gallero. Quedaron varias veces —en una incluso acabaron de copas con el exjuez Gómez Bermúdez, ahora abogado del presunto testaferro de Villarejo en Estepona—. Victoria convenció a Marisa para conocer a su amigo, el periodista Javier Hidalgo, una de las identidades ficticias del comisario Villarejo, según ha sabido Público tanto por Victoria Álvarez como por fuentes muy cercanas a Gallero.
Se reunieron en el madrileño hotel Miguel Ángel, al lado de la Dirección General de la Policía, con la buena o mala suerte de que Pedro J. Ramírez vio a la exdirectora de programas de televisión, que tantas veces le había llevado a sus tertulias, junto con el policía, al que él conocía. "¿Qué haces con este?", le preguntó más tarde. "Pero si es un periodista que me ha presentado Vicky", le contestó Gallero. "No, es el comisario Villarejo y mejor estar lejos".
Cospedín trabajaba para Cospedal, Villarejo para Casals y Big para el secretario de Estado
¿Pero cuál es el origen real de la competitividad entre los comisarios Andrés Gómez Gordo, José Manuel Villarejo y Enrique García Castaño si supuestamente todos ellos trabajan para apoyar a la UDEF y entregar las pruebas al juez? Pues que como han demostrado los hechos, ninguno de ellos, incluido el despistado número dos de la Policía, el DAO Eugenio Pino, tenía la finalidad de poner en conocimiento de la Justicia sus avances. Cada uno trabajaba para una facción del poder del PP, como relata García Castaño a continuación:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
García Castaño: El contacto fundamental que tenía el señor Villarejo para llegar al presidente del Gobierno era Mauricio Casals. Mauricio Casals le informaba de todo lo que le interesaba a Villarejo y Villarejo le informaba a Mauricio Casals de todo lo que le interesaba al presidente del Gobierno.
La sospecha de García Castaño, que es quien le está rindiendo cuentas realmente al secretario de Estado, Francisco Martínez, como demostrarán sus comunicaciones telefónicas, es también puesta de manifiesto por Eugenio Pino. En realidad, el exDAO va un paso más allá y señala junto a Mauricio Casals, consejero de Atresmedia y presidente de La Razón, al marido de Cospedal, Ignacio López del Hierro, denominado por Villarejo el 'Polla', como las dos personas que realmente mueven los hilos del veterano comisario, según se escucha en su declaración de diciembre de 2020:
Tu navegador o dispositivo no soporta HTML5 audio
Fiscal: Usted dice "en este contexto, Pepe K, Villarejo, respondía solo a M. Casals y al maridísimo, estos tienen la clave".
Sin embargo, no es hasta mayo de 2015 cuando la operación Kitchen sale a la luz y comienza a ser un arma arrojadiza en la estrategia de defensa del comisario Villarejo.