La Audiencia de Barcelona abre la vía a una posible amnistía de la ex directora del CNI, Paz Esteban, por el 'caso Pegasus'

La Audiencia de Barcelona ha preguntado al juez de Barcelona que investiga el espionaje con Pegasus al presidente de la Genetralitat en funciones, Pere Aragonès, si ha planteado la amnistía de la ex directora del CNI Paz Esteban, antes de resolver el recurso que ésta presentó contra su imputación por vía de la Abogacía del Estado. Con esta providencia, la Audiencia de Barcelona fuerza los trámites jurídicos y permite abrir el camino al que, de facto, se pueda plantear que Esteban pueda ser amnistiada.

En una providencia, fechada el pasado 8 de julio y a la que ha tenido acceso Público, la sección novena de la Audiencia, que tiene en sus manos el recurso de Esteban, insta al juez a aclararle si él de oficio, las acusaciones o la defensa, han planteado la amnistía de la ex directora del CNI y, en su caso, si ya está resuelta.

Aunque en primera instancia es el juez instructor es quien debería decidir si Esteban es amnistiable, en caso de recurso sería la propia Audiencia de Barcelona la que acabaría resolviendo al respecto.

Según explica la agencia EFE, la ley de amnistía no contiene ninguna alusión a los servicios secretos, pero sí considera amnistiables las conductas "realizadas en el curso de actuaciones policiales dirigidas a dificultar o impedir" los actos enmarcados en el proceso, algo que se podría interpretar en el caso de Pegasus. La consideración de la amnistía sería un reconocimiento de la ilegalidad del espionaje que se hizo en el teléfono de Aragonès, según fuentes judiciales consultadas por Público.

Esteban, que sigue como investigada en el juzgado de instrucción número 29 de Barcelona a raíz de la querella que presentó el president de la Generalitat en funciones por el espionaje en el teléfono móvil con el sistema Pegasus, pidió que se archivara la causa contra ella en un recurso ante la Audiencia de Barcelona al que se sumó la Fiscalía.

El titular del juzgado de instrucción número 29 de Barcelona, Santiago García, había rechazado archivar la investigación, a la espera del resultado de varias diligencias con las que pretende determinar si los ataques efectuados en el móvil de Aragonès, en la etapa en la que Esteban dirigía los servicios secretos, contaron siempre con aval judicial.