La sección sexta de la Audiencia Provincial de Madrid describe en su auto del 5 de septiembre el incidente de tráfico que protagonizó Esperanza Aguirre, la expresidenta de la Comunidad de Madrid.

La Audiencia resuelve que el caso sea instruido por un delito de desobediencia, penado hasta con un año de cárcel, y no como falta como había decretado el juez instructor.

El auto califica los hechos descritos por los agentes como un posible delito de desobediencia pasiva, por lo que ordena al juez instructor que tramite la causa por el artículo 556 del Código Penal, pero no entra a juzgar si se produjo o no dicho delito.

La Audiencia describe lo ocurrido el pasado 4 de abril, cuando Aguirre aparcó en doble fila en plena Gran Vía, fue parada por los agentes por dicha infracción y llegó a chocar con su vehículo contra ellos y darse a la fuga.

La expresidenta de la Comunidad de Madrid había estacionado su vehículo indebidamente en el carril bus de la Plaza del Callao. Cuando los agentes estaban poniendo la multa al vehículo, llegó Esperanza Aguirre. Un agente le solicitó el permiso de conducción y la documentación del coche.

Aguirre entregó diversos papeles al tiempo que le decía: '¿Qué pasa? ¿Bronquita y denuncia? Venís por mí porque soy famosa. Tienes la placa. Denuncia al vehículo'; entre los documentos entregados por la denunciada no se encontrab la documentación solicitada por el Agente por lo que éste 'le solicitó nuevamente la entrega de dicha documentación, contestando la denunciada ‘Yo me voy. Tienes la placa. Denúnciame'.'.

El agente le respondió que no había entregado la documentación, y Aguirre 'se montó en su vehículo y arrancó el motor'.

El agente le dijo 'que no se podía marchar ya que no había finalizado la denuncia', al tiempo que otro agente 'se dirigió a la denunciada diciéndole que no avanzase con el vehículo; pese a lo cual, la denunciada aceleró, poniendo en marcha el vehículo, con lo que hizo retroceder varios metros al indicado Agente, terminando éste por apartarse de la trayectoria del vehículo; llegando la denunciada a colisionar con una de las motocicletas de los Agentes en la maniobra para marcharse del lugar; cayendo la motocicleta al suelo y resultando con daños; siguiendo la denunciada su trayectoria por la vía pública, en dirección a su propio domicilio; situándose junto a su vehículo el vehículo de la Policía Municipal del Ayuntamiento de Madrid ocupado por los Policías Municipales 10471.1 y 10467.0, quienes habían observado lo acontecido con los Agentes de Movilidad, quienes ordenaron a la denunciada que detuviera su vehículo, haciendo ésta caso omiso a tal orden, siguiendo su trayectoria, siendo seguida por citados Policías Municipales y Agentes de Movilidad en sus respectivos vehículos, llevando éstos en funcionamiento las señales acústicas y luminosas, hasta llegar al domicilio de la denunciada, donde ésta se introdujo en el mismo, saliendo posteriormente de tal lugar un guardia civil, encargado de la protección de la denunciada, quien entregó a los Policías Municipales citados la documentación del vehículo de la denunciada' (sic).

Los actos de desobediencia de Esperanza Aguirre descritos por los agentes 'tuvieron lugar en la vía pública, en una zona muy concurrida, por lo que se incrementa la gravedad de los actos de desobediencia al lesionar en mayor grado la dignidad del ejercicio de la función pública llevada a cabo por los agentes de la autoridad', resuelve la Audiencia al tiempo que ordena al juez instructor tramitar la causa como delito de resistencia pasiva grave.