LUZES-PÚBLICO
Carlos Jiménez, periodista: "La televisión de Galicia era el órgano de propaganda de un candidato, ahora lo es de dos"
Publicidad
santiago, Actualizado:
La condena a la CRTVG por sancionar ilegalmente a Carlos Jiménez demostró que las represalias existen en San Marcos, la sede de la radio y la televisión pública de Galicia. Lo de este trabajador de la Radio Galega es el caso más grave de una larga ristra de trabajadores que ven con preocupación la deriva de una compañía pública en la que no se cumple la ley. Once años después de la aprobación de la norma reguladora de los medios públicos audiovisuales de comunicación de Galicia, en la CRTVG sigue sin haber Estatuto profesional ni Consejo de Informativos. Tampoco un plan de igualdad.
Cuando se le pregunta al director general de la CRTVG, Alfonso Sánchez Izquierdo, por la manipulación, la falta de pluralismo, el uso del gallego o el machismo de algunos contenidos, la respuesta es siempre a misma: la estabilidad financiera de la compañía. Como si en su estatuto no figuraran también los principios de legalidad, objetividad y buen gobierno. Lleva trece años al frente de la empresa, los últimos tres, en funciones.
Publicidad
Si quieres seguir leyendo esta entrevista en gallego, pincha aquí.
Acompaño a Carlos Jiménez al Parlamento para atender la comparecencia de la nacionalista Olalla Rodil, que lleva al pleno una proposición no de ley para la renovación del cargo del director general. En ella hace alusión a la condena en firme contra el medio público por la "vulneración de los derechos fundamentales del trabajador".
Acabamos de presenciar la comparecencia. ¿Qué le han parecido la intervención y las réplicas del Partido Popular?
Pues me pareció una situación de balones fuera y de patadas hacia delante. Las respuestas del PP en sede parlamentaria van en la línea de las que hizo el director general. El vicepresidente segundo de la Xunta, el señor (Diego) Calvo hablando del "y tú más" cuando estaba el bipartito.
Publicidad
En esas seguimos trece años después.
Yo creo que la ciudadanía, los trabajadores y trabajadoras de la CRTVG, lo que quieren es saber qué pasó. Les preocupa la deriva de esta compañía, y no se les da respuesta. Creo que es un tema muy grave lo de esta sentencia, que consideramos histórica, desgraciadamente histórica, en la que se reconoce que se conculcaron derechos fundamentales como la tutela judicial o la libertad de expresión o de pensamiento y la libertad política. La respuesta es la de "vengo aquí hablar de mi libro", del superávit de la compañía, y refiriéndose a tiempos pretéritos que a nadie interesan. Aun gobierno que lleva trece años fuera de la Xunta. A la gente lo que le importa es el hoy y el ahora.
Antes de su expediente disciplinario no formaba parte de ningún sindicato. Ahora está en la CUT y en el comité de empresa. ¿Fue su situación de indefensión la que le llevó a ello?
Sí, yo no estaba afiliado ni formaba parte del comité ni de ninguno otro órgano. Me lo pidieron los compañeros. El sindicato me brindó su apoyo desde el principio con su abogado, Brais, que fue de mucha ayuda. Hace tres años me propusieron presentarme como candidato en representación de los trabajadores de la radio. Un compañero acababa de dejarlo. Yo llevo 29 años en la CRTVG, la mayoría en la radio, y la conozco bastante bien. También a las compañeras y compañeros.
Publicidad
Y sigue ahí, más de 200 "venres negros" después, formando parte también de Defende a Galega
Sí. Mi expediente nace a raíz, fundamentalmente, de dos cosas. No lo digo yo, lo ponen en la sentencia. En primer lugar, de mi apoyo público a Tati Moyano. Me parece muy injusto lo que se hizo con ella, y creó una gran indignación entre las compañeras y compañeros. Yo había subido un tuit con un hastag creado por la corporación, aquel de "presume da Galega", poniendo algo así como: "Aquí uno que también #presumedagalega y por eso cree que defender a sus compañeros, como Tati Moyano, es de justicia, y por eso #DefendeAGalega". A partir de ahí, empiezan a pasar cosas raras.
Además, como buena parte de la plantilla, estabas en juicios laborales con la compañía.
Sí, y aunque el señor Sánchez Izquierdo diga que ganan la mayoría de estos juicios, son cientos y cientos las sentencias en contra de la CRTVG, y de todo tipo, no solo en el laboral, sino en la conculcación de derechos fundamentales, por despidos improcedentes… Yo estaba en litigios con la empresa y le gané quince juicios, la mayoría por reclamación de cantidades no cobradas, pero también gané mi condición de indefinido y antigüedad. Entonces es cuando me expedientan. Yo llevaba diez años trabajando en el doblaje y locución para programas que se emiten en los medios de la empresa, siendo felicitado por directivos de la misma.
Publicidad
Y con la compatibilidad aprobada
Sí, yo creo que ellos no lo sabían. La compatibilidad en la función pública la solicita un trabajador, pero tiene que tener un informe favorable de la empresa. Yo hacía doblaje y locución para programas de la TVG. Recuerdo a una alta directiva de la empresa decirme que no hiciera más, que mi voz ya sonaba mucho. Es decir, sabían de sobra que hacías ese trabajo fuera de la Radio Gallega.
Es decir, sabían de sobra que hacía usted ese trabajo fuera de la Radio Gallega, pero para la TVG.
Efectivamente, y cuando aparece el famoso tuit pues empiezan a decirme que hago competencia desleal… ¡Haciendo un programa para ellos! No para Telecinco. Me dicen que descubren "con sorpresa", como pone en el expediente, que hago esa otra locución y me abren un expediente. Entonces yo presento el informe de compatibilidad, que pienso que creían que no existía.
Publicidad
Menos mal que lo conservó durante esos años.
Sí, menos mal que lo había guardado porque si no estaría en la calle. El expediente que me abrieron era por una falta muy grave que podía finalizar en despido. Al final, la sanción quedó en 6 días de suspensión de empleo y sueldo, que fueron reconvertidos en 9 por la persona que firmó el expediente. No acepté la sanción, creía que era injusta y la llevé al juzgado. En estos casos es en el demandante en quiem recae el peso de la prueba y demostramos no sólo que se conculcaron mis derechos en lo referente a la libertad de expresión, sino que la CRTVG trató de castigarme por mi posición en defensa de la libertad y mi participación en Defende a Galega. Esto se sumó a que tenía diversas demandas favorables a mí y contrarias a la empresa por mi situación laboral. A esto le llaman conculcación del derecho a la tutela judicial, porque todo el mundo tiene derecho a defenderse contra lo que considera injusto. Aportamos todas las pruebas testimoniales y probamos que todo había sido un montaje de la CRTVG para castigarme. El juzgado me dio la razón en primera instancia y en el TSXG lo confimaron punto por punto.
Y la CRTVG no recurrió.
El único camino que les quedaba era acudir al Supremo en casación y, para eso precisaban una sentencia de otro tribunal superior que fuera muy semejante a la mía. Como comprenderá, no la había.
Publicidad
¿Qué implicó la sentencia para la CRTVG?
Tuvo que retirar la sanción y pagarme una indemnización por daños y perjuicios de 6.251 euros, que era lo mínimo. Pero en la práctica, no ha cambiado nada.
A nivel personal estos procesos siempre dejan marcas. ¿Nadie le ha pedido perdón?
No, nadie lo ha hecho Es un tema muy duro, y la gente más próxima a ti es la que sabe por lo que pasas. Ingenuamente piensas que alguien te va a pedir disculpas. Una persona de la empresa muy próxima a la dirección me dijo que la cosa se había desmadrado, que no habían sabido medir la repercusión que podía tener mi caso. La ingenuidad de esos primeros días ya se me ha pasado. No creo que nadie se vaya a disculpar en nombre de la compañía, las personas implicadas siguen en sus cargos. El director general ha dicho en alguna de sus comparecencias en la sesión de control en el Parlamento que él defiende siempre sus trabajadores. Debe pensar que yo, que llevo casi 30 años en la empresa, no lo soy. A mí en ningún momento me defendió, dijo que mi caso suponía una litigiosidad muy baja, un 0,00 no sé qué por ciento. ¡Sólo faltaba que hubiera habido un 30% de sentencias condenatorias por conculcación de los derechos fundamentales!
Publicidad
El Comité de Empresa viene denunciando una manipulación informativa constante en la CRTVG. ¿Cómo opera esta práctica, contraria al código deontológico de la profesión?
Como acabamos de escucharle a la diputada, antes la CRTVG era un órgano de propaganda de un candidato. Ahora son dos para loar: el que ya no está, pero que está en Madrid candidatándose [Alberto Núñez Feijóo], y el que quedó [Alfonso Rueda]. Y lo hacen de una manera muy grosera. Cuando se cumplieron los cien días de gobierno de Alfonso Rueda como presidente de la Xunta, salió la señora Paula Prado, diputada del PP, con un micro del PP en un Telexornal [telediario] porque la CRTVG no envió a un periodista a cubrirlo. Eso da idea del nivel al que llega la manipulación. Por no hablar de un tema tan grave como el de los represaliados de la guerra civil, cuando a Ione Belarra le pregunta un periodista de un medio de ultraderecha. Twitter le cierra la cuenta al individuo por ese vídeo, él lo denuncia en esa red social y el vídeo acaba saliendo en el Telexornal.
En el telediario de un medio público…
Sí, y además contextualizando como única opinión una cuestión como la de la guerra civil y la exhumación de los huesos de víctimas del franquismo de una fosa común para preguntar sobre Paracuellos. La respuesta a todo esto: "Ustedes manipulaban más en su época".
Publicidad
El tema central de la comparecencia fue el director general, Alfonso Sánchez Izquierdo, que hace tres años que agotó el mandato que marca la ley.
Sí, lo que se pedía era su renovación de esa dirección general. Es algo que recoge la ley de 2011. Tampoco tenemos un Consejo de Informativos que nos permita defendernos en casos como el mío o cualquier otro que afecte a la libertad de expresión y que sea efectivo contra la manipulación. No reclamamos nada extraño, pedimos algo que ya está aprobado en sede parlamentaria desde hace 11 años, igual que el relevo del director general, que se encuentra en una situación de excepcionalidad.
Excepcionalidad gracias a una argucia legal del PP.
Efectivamente, a través de un acompañamiento en la ley de presupuestos.
Publicidad
¿Y por qué crees que el director general es intocable? ¿Porque no hay otra figura de consenso o es miedo a perder el control?
Pienso que un poco todo. También se dice habitualmente en los mentideros éde la casa, llamémosles así, que si fuera por él el señor Sánchez Izquierdo se habría marchado hace tiempo, que no quiere seguir, que no tiene fuerzas... Pero no hay un relevo ni una propuesta alternativa. Lo único que se pide aquí es que se candidate gente yque haya un acuerdo.
¿Lo ve factible? ¿Que alguien alcance la mayoría de dos tercios necesaria en el Parlamento?
Lo que tenemos claro es que la figura actual no representa lo que necesitamos en la CRTVG, que es la defensa de sus principios fundacionales, de la libertad de expresión, el pluralismo y la defensa del gallego, que es uno de los puntos más importantes. Si nosotros tenemos un motivo de ser es que somos una radio y una televisión en gallego, pero somos una tele en la que se emplean el castellano o el castrapo [variante del castellano hablado en Galicia caracterizada por la abundancia de palabras y expresiones tomadas del gallego].
Publicidad
Incluso hay tertulias en las que el castellano es la lengua mayoritaria...
Tenemos ahí el Conexión Madrid, que comenzó la temporada pasada y al que no le veíamos necesidad porque la conexión Madrid la tenemos todos los días en los medios de comunicación general y nosotros tenemos que diferenciarnos de eso. No es que no sea interesante lo que pasa en Madrid, pero ya tienen cobertura bastante, ya se hace bastante propaganda, y más con el candidato que hay ahora a las próximas elecciones.
¿Y las denuncias por machismo en la CRTVG? ¿En qué punto está el plan de igualdad?
Pues tenemos un plan de igualdad en un cajón desde hace un año, con las compañeras que lo están negociando encontrando solo obstáculos. Recientemente vimos un caso muy grave, el anuncio de un programa de la televisión que decía cosas como "el amor de verdad te hace sufrir" o "el amor de verdad es una locura". Parece que se trata de banalizar, y frases como estas acaban provocando muertes. Es así. Están muriendo mujeres todos los días por este tipo de mensajes que parecen anecdóticos, pero que realmente tienen mucha carga de profundidad. El hecho de que salga así, tan alegremente, y no se le dé importancia desde un medio como el nuestro es lo que nos preocupa desde la representación sindical.
Cualquier medio, pero uno público debería ser, si cabe, más escrupuloso con este tipo de mensajes.
Es dar ejemplo. Pero si banalizas esos discursos, las personas que ejercen violencia contra las mujeres encuentran normalización, lo mismo que sucede con los mensajes de ultraderecha. Cuando das cabida a sus discursos en una televisión o emisora como la nuestra le estás dando ánimos a gente a la que antes no se les daban. A lo mejor ahora hay necesidades espurias o intereses políticos porque igual son necesarios en el futuro para volver o alcanzar el poder.
Volviendo a la renovación, una que sí que no falta es la del consejo de administración de la CRTVG. ¿Cómo recibieron en el comité de empresa el acuerdo entre PP y PSdeG?
Se lo fuimos a decir directamente a los parlamentarios del PSdeG. Ellos nos argumentaron que había una serie de acuerdos de tradición democrática, que no votaban en contra de la renovación de ciertos organismos como éste, que tenían fuera de éste otros acuerdos y que iban en bloque. Nosotros les dijimos que todo eso lo pueden decir hacia dentro de la organización, y sabemos que hay gente del propio partido que no está de acuerdo. Pero que tienen que explicarle a los trabajadores y a la gente que ve lo que pasa en la TVG el por qué. Para nosotros fue una decepción muy grande y así se lo trasladamos al portavoz del PSdeG, que nos recibió en sede parlamentaria el día de la votación.
Esta situación imagino que provoca hastío entre el personal de la CRTVG. ¿También en el movimiento Defende a Galega?
Sí, claro, porque somos gente muy significada. Hay quien trabaja mucho en ese movimiento, está ahí todos los venres negros. Ahora queremos hacer un llamamiento para que se unan otras asociaciones. Constituir una plataforma y movilizarnos. Hubo quien dejó Defende a Galega y ahora están en pantalla o tienen un plus, les están dando prebendas. Y al revés, la gente más comprometida cada vez está más invisibilizada. Quien iba a cubrir actos políticos o culturales ahora va a buscar el pepino más grande de Vilalba. O la política de hacer pasillos: te quitan de presentar, como fue el caso de un rostro tan reconocible como el de Marga Pazos. Eso es una presión, un acoso muy difícil de demostrar, cómo a esa gente la van alejando de puestos de responsabilidad, de la pantalla, de los micros y de otras labores para las que están sobradamente preparadas. Y la política laboral, pues es cada vez más precaria, gente cada vez más nueva, más dócil… Y hay miedo. Y ya sabes que la autocensura es la peor de las censuras. Mucha gente se corta, se queda en silencio.
¿Cómo cambiar todo eso?
Desde Defende a Galega y desde la parte social, los trabajadores lo que queremos y lo que defendemos es libertad para trabajar y para expresarnos, y que los medios públicos, la radio y la televisión gallegas, cumplan la función para la que fueron creadas. Y que todo esto se haga con pluralidad. Que se cumpla la Ley de Medios, que tengamos un Consejo de Informativos y un Estatuto profesional… Vemos que todo esto se incumple y que la situación para los trabajadores y trabajadoras se vuelve cada vez más asfixiante. Estoy seguro de que si tuviéramos Consejo de Informativos, mi caso tendría más trascendencia. Seguramente sería insuficiente, pero a mí me hace gracia la declaración del director general afirmando que la ley de medios "está obsoleta" y también que ha sido muy "cumplida". Cuando no se cumple es porque hay interés en que así sea. Ojalá pudiéramos decir que el Consejo de Informativos no sirve. Esto nos hace ver, cuando les molesta tanto, que realmente podría resultar útil.