Renzi, el ambicioso
Publicidad
Matteo Renzi, el líder del Partido Demócrata y aún alcalde de Florencia, prepara el programa de Gobierno para convencer a sus futuros aliados basado en tres puntos principales: la ley electoral, la creación de empleo, y la reducción del coste de la política. Uno de los diputados del PD, Matteo Richetti, muy cercano al próximo primer ministro italiano, resumía bromeando el programa del posible Ejecutivo: "Es muy sencillo: Toma en consideración todo lo que ha dicho y no ha hecho la política en los últimos años y ahí lo tienes".
Publicidad
Casado y con tres hijos, Renzi nació en Florencia el 11 de enero de 1975. Tras completar sus estudios en la Escuela Secundaria Dante de la ciudad toscana se licenció en Derecho en 1999. Su actividad política comenzó durante sus años de estudiante universitario, cuando colaboró en el nacimiento del Comitati per Prodi y se inscribió en el Partido Popular Italiano, convirtiéndose en 1999, a la edad de 24 años, en el secretario provincial más joven de esa formación.
Después de unos años ejerciendo diversas responsabilidades en la empresa CHIL, una compañía dedicada a los servicios de mercadotecnia, en 2004 se convirtió en presidente de la provincia de Florencia. En este cargo llevó a cabo diferentes iniciativas basadas en la bajada de las tasas provinciales, la reducción del número de personal y de dirigentes en las instituciones y el plan provincial de la basura.
Cuatro años después fue el ganador de las elecciones primarias del Partido Demócrata para encabezar las listas a la alcaldía de Florencia en los comicios de junio de 2009, que desembocaron en su triunfo. Durante su gestión al frente de la ciudad, se aprobó por primera vez en Italia un plan estructural para reactivar áreas infrautilizadas y una campaña con el objetivo de reducir el número de muertes en las carreteras. Además en sus primeros cien días de gobierno consiguió la peatonalización total de la céntrica e histórica plaza florentina del Duomo.
Publicidad
A los 24 años se convirtió en el secretario provincial más joven del Partido Popular Italiano
Tras su sólida y fulgurante carrera política en Florencia intentó dar el salto a la política nacional con su candidatura a las pasadas primarias de 2013 del Partido Demócrata. Después de un apasionante duelo resuelto en dos vueltas, Renzi tuvo que conformarse con el 40% de los sufragios, lo que supuso la victoria para el entonces representante de la izquierda tradicional, Pier Luigi Bersani. Sin embargo, el duelo entre la tradición y los nuevos aires reformistas en la política italiana, una de las más inestables de Europa, se saldó con el triunfo de la última, representada por este joven y mediático florentino que se convirtió finalmente en líder del PD el pasado 8 de diciembre tras una victoria aplastante en las elecciones primarias.
Publicidad
Tras esa victoria, Renzi ha defendido la idea de una profunda transformación de las instituciones italianas, con la modificación de la ley electoral como una de sus grandes prioridades. El pasado 18 de enero, se reunió con el ex primer ministro Silvio Berlusconi para modificar la actual ley electoral italiana, lo que le valió las críticas de una gran parte de la sociedad italiana y sobre todo supuso un desafío al presidente del gobierno de Italia, el también socialdemócrata Enrico Letta. La fricción que se desencadenó a raíz de la reunión con Il Cavaliere, llegó a su punto más álgido cuando parecieron los primeros rumores que apuntaban a que Renzi podría relevar a Letta como presidente del Gobierno.
Normalmente, los Ejecutivos italianos se dan un margen de 100 días para hacer balance de sus primeros resultados, pero Renzi, según indican analistas, quiere dejar cerradas algunas reformas en 45 días. Pretende también convencer con medidas rápidas a la mayoría de los italianos, reticentes de que vaya a ser el tercer presidente del Gobierno consecutivo que no sale de las urnas.
Publicidad
Lo primero que intentará aprobar será Italicum, la ley electoral concebida por Renzi y Berlusconi que se inspira en la vigente en España. Comprende un nuevo sistema de listas cerradas, un premio para la mayoría más votada del 18% adicional, así como una posible segunda vuelta en el caso de que ninguna coalición electoral consiga el 37% de los votos en la primera ronda.
Su reunión con Berlusconi para reformar la Ley Electoral le valió las críticas de una gran parte de la sociedad
Publicidad
La nueva ley también comprenderá algunas reformas constitucionales como la eliminación del actual bicameralismo al convertir el Senado en una verdadero espacio de representación regional, y con una reducción de 315 a 150 miembros, y "todos ellos sin el sueldo". La reducción del número de senadores y otra serie de recortes al coste de la política, como el control y la devolución de algunos gastos a los parlamentarios, son otras de las prioridades de Renzi.
Sobre el problema del desempleo, el exalcalde de Florencia presentó hace algunas semanas un documento que bautizó como Jobs Act y que se inspiraba el nuevo laborismo del exprimer ministro británico Tony Blair. Entre los puntos principales es la reducción o eliminación de algunos impuestos para aquellas empresas que contraten jóvenes menores de 30 años, pues el desempleo entre los jóvenes de 16 a 25 años toca en Italia 41,6%.
Publicidad
Renzi también prevé disminuir las tasas reflejadas en las nominas de los trabajadores, para que aumente la disponibilidad económica. El florentino insiste en la necesidad de simplificar el gran número de contratos que se pueden realizar en Italia, pero también la introducción para favorecer el empleo de los jóvenes de un "contrato de introducción a la empresa con tutelas progresivas", una especie de contrato indefinido a fases.
Otra idea de Renzi espera introducir el llamado "cheque universal", una ayuda temporal a los que pierdan el trabajo mientras siguen buscándolo y que no existe en Italia. Otro de los temas claves de la policía de Renzi será la lucha contra la burocracia, de las instituciones o los organismos públicos. Con este programa, Renzi tendrá que convencer al Nuevo Centroderecha de Angelino Alfano y a otras formaciones centristas, para que entren en el Ejecutivo.