Marruecos prevé levantar una valla a lo largo de la frontera con Argelia para evitar el paso de migrantes, sobre todo procedentes de países subsaharianos, según Al Massae y Ajbar al Yawm. Ambos periódicos se hacen eco de la reunión mantenida el pasado viernes en el aeropuerto de la ciudad de Uxda, fronteriza con Argelia, por parte de la cúpula del ministerio del Interior y de las Fuerzas Armadas marroquíes.

Según Ajbar al Yawm, la valla tendrá 70 kilómetros de longitud y estará reforzada por 30 torres de control y cámaras de alta precisión.

Sin embargo, el otro diario asegura que la longitud cubrirá 450 kilómetros, desde la costa mediterránea hasta la localidad de Figuig, y añade que será una valla 'alambrada'.

La próxima construcción de esa valla, que no ha sido confirmada oficialmente por el Ministerio del Interior marroquí, entrará dentro de la nueva política de emigración recientemente anunciada por el Gobierno de Rabat para tratar de regularizar o expulsar a los migrantes que se encuentran en Marruecos en situación administrativa irregular. El Gobierno calcula que son entre 25.000 y 40.000.

Los dos periódicos coinciden en acusar a las autoridades argelinas de 'empujar' a los migrantes a cruzar sus fronteras para penetrar en Marruecos y luego tratar de acceder a territorio europeo a través principalmente de la frontera con Melilla.

La construcción de la valla podría generar nuevas tensiones entre Marruecos y Argelia, países que tienen cerrada la frontera terrestre desde 1994, lo que no ha impedido durante muchos años un floreciente comercio de todo tipo de mercancías, especialmente combustibles, tabaco y dátiles desde Argelia. Argelia, por su parte, suele acusar a Marruecos de ser laxo con los traficantes de droga (principalmente hachís) hacia su país.