El candidato del Partido Popular Europeo (PPE) a la presidencia de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha reclamado de nuevo este lunes la presidencia de la Comisión alegando que los conservadores han ganado las elecciones a la Eurocámara y ha desvelado que ya ha hablado con la canciller alemana, Angela Merkel, aunque no ha aclarado si ella le apoya. 'No voy a informar sobre las conversaciones que he tenido con la canciller Merkel y otros porque no soy portavoz de mis anteriores colegas del Consejo Europeo', ha dicho Juncker en rueda de prensa.

'La posición de la señora Merkel está muy clara. Ustedes no lo creen, pero es así', ha agregado, dando a entender que cuenta con su respaldo. Pero Juncker también sabe que además, del apoyo de Merkel, va a necesitar el apoyo de los socialdemócratas: 'No vale la pena hacer demasiadas conjeturas. La única opción posible es la gran coalición entre los dos grandes partidos'.

El Partido Popular Europeo (PPE), según los últimos datos actualizados de la Eurocámara, logró en estos comicios 214 escaños (28,5% de los votos) y los socialdemócratas (S&D) con 189 (25,17%), un resultado por debajo de lo que ambos consiguieron en 2009 e insuficiente para formar coaliciones independientes con terceras fuerzas sin el apoyo de otras formaciones.

Juncker destacó el aval de las urnas para convertirse en el próximo líder de la Comisión y reiteró que es para ese puesto y no para el de presidente del Consejo Europeo para el que ha hecho campaña ante las preguntas de los periodistas.

El candidato de los conservadores europeos reconoció que todavía necesita la nominación del Consejo Europeo para convertirse en el presidente el Ejecutivo comunitario, si bien apuntó que en la cena de líderes de este martes no llegará 'de rodillas' sino 'como ganador' de las elecciones.

'El tratado es claro, debe tenerse en cuenta el resultado de las elecciones', señaló Juncker.

Los líderes del PPE —incluido el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy— se reunirán mañana con anterioridad a la cena informal de jefes de Estado y de Gobierno para analizar resultados y perfilar posturas. Juncker señaló que no espera sin embargo que de la cumbre de mañana surja ya ninguna recomendación concreta 'pues hay muchos asuntos que ver y otros puestos que repartir también'.

El conservador luxemburgués destacó que pese al resultado de las fuerzas de extrema derecha y euroescépticas en países como Francia (el Frente Nacional se ha alzado como primera fuerza), 'dos tercios de los europeos han votado por fuerzas tradicionales y europeístas'.

'Habrá que dar respuesta a los euroescepticismo pero no hay que olvidar que lo mayoritario ha sido el europeísmo', señaló.