Informe OEA El Grupo de Puebla pide al Gobierno golpista de Bolivia que entregue "inmediatamente el poder del Estado"
El informe de la OEA contra Evo Morales ha sido cuestionado por numerosos estudios al haber sido elaborado con "datos incorrectos y técnicas estadísticas inapropiadas". Este informe sirvió como base y coartada a los opositores del expresidente que perpetraron el golpe en Bolivia.
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madrid, Actualizado:
Después de las elecciones celebradas el 20 de octubre de 2019, la Organización de Estados Americanos (OEA) recomendó la repetición de la primera ronda, en la que resultó ganador Evo Morales, que fue acusado por la oposición de fraude electoral.
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Tras las rectificaciones del informe de la OEA demandadas desde la celebración de las elecciones por centenares de expertos, el CELAG, los estudios del Laboratorio Electoral del Massachusets Institute of Technology (MIT), varios estudios del Centro de Investigación en Economía y Política (CEPR), entre otros, y después de salir a la luz un nuevo estudio a cargo de investigadores independientes que cuestiona dicho informe, el Grupo de Puebla, un foro político y académico integrado por representantes políticos del ámbito latinoamericano, ha pedido al Gobierno golpista de Bolivia, liderado por Jeanine Áñez Chávez, que entregue "inmediatamente el poder del Estado a causa del retraso sistemático e inexplicable de las elecciones en dicho país".
El CELAG denunció que la OEA fabricó el informe induciendo en "la opinión pública una deducción falsa"
El Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), una institución dedicada a la investigación, estudio y análisis de los fenómenos políticos, económicos y sociales de América Latina, publicó un mes después de las elecciones un artículo en el que denunciaba que la OEA fabricó el informe que denunciaba el fraude electoral en Bolivia. Este documento sirvió de base y de coartada a los opositores del expresidente Evo Morales que perpetraron el golpe en Bolivia. El CELAG aseguraba que "la OEA elaboró un informe cuestionable para inducir en la opinión pública una deducción falsa".
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Legitimidad de la presidencia de Evo Morales
En diciembre, más de un centenar de expertos internacionales en economía y estadística firmaron un manifiesto en contra del relato instaurado sobre el fraude electoral del que acusaban a Evo Morales y demostraron que el cambio en la ventaja del expresidente boliviano no fue ni "drástico" ni es "difícil de explicar".
Las nuevas noticias sobre el informe de la OEA han provocado que el Grupo de Puebla haya solicitado a través de un comunicado que la OEA convalide los resultados electorales del 20 de octubre de 2019 y declare la legitimidad de la elección a la presidencia de Evo Morales.
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El Grupo de Puebla expresa su preocupación frente a la nueva evidencia de lo apresurado e intencionado de la declaración de la OEA: un nuevo estudio independiente según el cual la conclusión de que los votos a favor de Morales aumentaron inexplicablemente una vez que el conteo se reanudó estuvo basada en datos incorrectos y técnicas estadísticas inapropiadas. Esta publicación se suma a otros estudios, como los de los investigadores del Laboratorio Electoral del MIT, publicado en The Washington Post, y a los del Centro de Investigación en Economía y Política (CEPR).
"Examinamos detenidamente la evidencia estadística de la OEA y hallamos problemas con sus métodos. Una vez que corregimos esos problemas, los resultados de la OEA desaparecen, sin dejar evidencia estadística de fraude", explicó el economista y coautor del informe Francisco Rodríguez en declaraciones recogidas por The New York Times.
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El foro político ha pedido que la OEA aclaré "de forma inmediata cada uno de los elementos que han sido controvertidos". A su vez solicitan la presencia de una comisión independiente a la Secretaría General de la OEA, que se encargue de restablecer la legitimidad democrática en Bolivia.
Entre los fundadores del Grupo de Puebla están políticos, pensadores, expresidentes y exministros como Pepe Mújica, Cuauthémoc Cárdenas, Rafael Correa, Lula da Silva, Clara López Obregón, José Luis Rodríguez Zapatero, Dilma Roussef o Ernesto Samper.