El expresidente cubano Fidel Castro ha defendido este viernes que el presidente estadounidense, Barack Obama, tiene el 'deber' de evitar que se produzca una guerra en la península de Corea, al tiempo que ha reclamado a Corea del Norte, país 'amigo' de Cuba, que cumpla con 'sus deberes'.

En un artículo que supone la reaparición de las Reflexiones de Fidel, la última de las cuales se había publicado el 19 de junio de 2012, el expresidente cubano considera que la situación creada en la península es 'un hecho increíble y absurdo', sobre todo porque se trata de 'un área geográfica donde se agrupan casi 5.000 de los 7.000 millones de personas que en este momento habitan el planeta'.

En opinión de Castro, la actual tensión -provocada por la decisión de Pyongyang de declarar el 'estado de guerra' con Corea del Sur y amenazar con atacar a Estados Unidos- 'se trata de uno de los más graves riesgos de guerra nuclear después de la 'crisis de octubre' en 1962 en torno a Cuba, hace 50 años', durante la conocida como 'crisis de los misiles'. 'Si allí estalla una guerra, los pueblos de ambas partes de la Península serán terriblemente sacrificados, sin beneficio para ninguno de ellos', ha advertido Castro, que dice haber tenido 'el honor de conocer a Kim Il Sung, una figura histórica, notablemente valiente y revolucionaria'. Kim es el fundador de Corea del Norte.

Castro: 'Corea del Norte siempre fue amistosa con Cuba, como Cuba lo ha sido siempre y lo seguirá siendo con ella' El expresidente ha recordado que 'la República Popular Democrática de Corea -nombre oficial de Corea del Norte- siempre fue amistosa con Cuba, como Cuba lo ha sido siempre y lo seguirá siendo con ella'. Sin embargo, 'ahora que ha demostrado sus avances técnicos y científicos, le recordamos sus deberes con los países que han sido sus grandes amigos'. Tampoco 'sería justo olvidar que tal guerra afectaría de modo especial a más del 70 por ciento de la población del planeta', ha subrayado.

Así las cosas, ha defendido que 'si allí estallara un conflicto de esa índole, el Gobierno de Barack Obama en su segundo mandato quedaría sepultado por un diluvio de imágenes que lo presentarían como el más siniestro personaje de la historia de Estados Unidos'. Por ello, 'el deber de evitarlo es también suyo y del pueblo de Estados Unidos', ha opinado Castro.