Crece la indignación internacional por las restricciones migratorias de Trump
Los países del Golfo guardan silencio
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BAGDAD/EL CAIRO.- Las críticas contra las restricciones migratorias del presidente de Donald Trump se multiplicaban el domingo, después de que numerosos países, entre ellos aliados tradicionales de Estados Unidos, describieran las prohibiciones como divisivas y discriminatorias.
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Gobiernos desde Londres hasta Teherán censuraron el decreto de Trump, que suspendió por cuatro meses la entrada de refugiados a Estados Unidos y prohibió temporalmente la llegada de viajeros de Siria y de otros seis países de mayoría musulmana para, dijo Washington, proteger a los estadounidenses de atentados terroristas.
En Alemania, que ha recibido a gran cantidad de personas que huyen de la guerra en Siria, la canciller Angela Merkel dijo que la lucha global contra el terrorismo no era excusa para las restricciones y "no justifica poner a personas bajo una sospecha generalizada sólo por su origen o su fe (religiosa)", dijo su portavoz.
Merkel expresó esa preocupación a Trump durante una llamada telefónica el sábado y le recordó que la Convención de Ginebra requiere que la comunidad internacional acepte a refugiados de guerra por razones humanitarias, añadió el portavoz.
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We will protect the rights and freedoms of UK nationals home and abroad. Divisive and wrong to stigmatise because of nationality
— Boris Johnson (@BorisJohnson) 29 de enero de 2017
La posición de Merkel coincidió con la opinión de gobiernos en París y Londres. "El terrorismo no conoce nacionalidades. La discriminación no es una respuesta", dijo el ministro de Exteriores francés, Jean-Marc Ayrault, mientras que su homólogo británico, Boris Johnson, afirmó en Twitter: "Es divisivo y equivocado estigmatizar a alguien por su nacionalidad".
Junto con Siria, la prohibición estadounidense afecta a viajeros con pasaportes de Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen.
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Trump dijo que su decreto, que veta indefinidamente la entrada de refugiados de Siria, no es "una prohibición contra los musulmanes", pero añadió que buscaría dar prioridad a cristianos que estén intentando escapar del país asediado por la guerra.
Los países del Golfo guardan silencio
Los aliados árabes de Washington, como los estados del Golfo Pérsico y Egipto, optaron por permanecer en silencio.