La Cámara de Representantes de Estados Unidos ha enviado formalmente los cargos de juicio político al Senado contra el expresidente Donald Trump por incitar a la insurrección en un discurso enardecido a sus seguidores antes del asalto al Capitolio, en el inicio de su segundo juicio político. La presidenta de esta institución, la demócrata Nancy Pelosi, ha sido la encargada de enviar el artículo de acusación al Senado. 

De esta forma, Trump se convierte en el único presidente de Estados Unidos que ha sido acusado por la Cámara dos veces y será el primero en enfrentar un juicio después de dejar el cargo. La condena en el Senado puede prohibir al expresidente ocupar un cargo público en el futuro.

Los líderes del Senado, que está dividido 50-50 con una mayoría para los demócratas gracias al voto de desempate de la vicepresidenta Kamala Harris, acordaron no comenzar el juicio hasta el 8 de febrero. No obstante, en las próximas horas se conocerán los procedimientos y protocolos que se llevarán a cabo durante el juicio político. 

Eso le da a Trump más tiempo para preparar una defensa y permite que la Cámara se concentre en las primeras prioridades del presidente Joe Biden, incluidos los nombramientos del Gabinete.

Después de una campaña de dos meses para tratar de desacreditar su derrota electoral, Trump instó el 6 de enero a sus seguidores a "luchar" para revertir el resultado. Más tarde, una turba descendió sobre el Capitolio, provocando que los legisladores tuvieran que refugiarse y prolongando durante varias horas la ratificación formal del Congreso de la victoria de Biden.

Diez republicanos de la Cámara se unieron a los demócratas en la votación para acusar a Trump. Los demócratas del Senado necesitarán el apoyo de 17 republicanos para condenarlo, una tarea complicada dada la popularidad de Trump entre los votantes republicanos.