El presidente del Gobierno explicó al término de la cumbre de París cuáles serán los medios que va a poner a disposición de la intervención internacional en Libia. Y, para despejar cualquier duda sobre los objetivos que puedan tener Londres, Roma o París, aseguró que España sólo participará en lo previsto por la resolución de Naciones Unidas, y sólo tiene una meta: una 'democracia sostenible' en Libia y 'proteger' a los civiles.

El presidente, en su intervención ante la prensa tras participar en la reunión de París, subrayó que la misión militar en Libia es muy diferente de la guerra en Irak, porque esta vez se cuenta con una resolución de la ONU. Precisamente, la falta de tal respaldo internacional para la invasión de Irak en 2003, según Zapatero, ha pesado esta vez en el empeño de buscar un amplio consenso en el seno del Consejo de Seguridad que votó la resolución sobre Libia el pasado jueves con diez votos a favor y cinco abstenciones.

'España asume su responsabilidad de hacer efectiva la resolución de la ONU: asume la responsabilidad de proteger al pueblo libio, de prestar apoyo humanitario y trabajar a favor de las aspiraciones de ese pueblo para lograr una democracia sostenible', dijo.

'España asume su responsabilidad de hacer efectiva la resolución de la ONU'

Para Zapatero, dada la presencia de países árabes en la cumbre de París, la comunidad internacional estaba 'ampliamente representada'. El presidente dijo que había informado al rey y al líder del PP, Mariano Rajoy, de la operación y que el martes explicará los motivos en el Congreso.

Los cuatro aviones de combate y el avión cisterna con los que España participará en la misión partieron del aeropuerto de Torrejón hacia una base italiana. Los demás medios tardarán unas 72 horas en ser movilizados, según fuentes cercanas a la Moncloa. Además, Zapatero anunció el viernes, que las bases de Morón y Rota estaban a disposición de los aliados.

El presidente no dio explicación alguna sobre la cadena de mando y las reglas de entrada en combate que regirán las operaciones españolas, ni tampoco sobre qué comandancia los dirigirá. Por el contrario, sí fue prolijo en explicaciones sobre la instauración de 'un principio', el de 'proteger' a un 'pueblo que sufrió agresiones gravísimas'.