Trillo todavía duda de la autoría intelectual del 11-M
Pío García-Escudero y Alberto Ruiz-Gallardón defienden que se debe acatar la sentencia del Supremo. Las distintas visiones reflejan las dos almas que todavía conviven en el PP.
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A vueltas con el 11-M. Al conocerse la sentencia del Supremo, el PP no se pronunció. Ni rastro de declaraciones. El silencio de Mariano Rajoy fue elocuente. Pero todo era cuestión de horas. Alguien tenía que meter la pata.
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Ayer Federico Trillo se encargó de recuperar la teoría de la conspiración y volver a arrojar dudas sobre la autoría del 11-M. Frente a la prudencia del resto de dirigentes conservadores, que desean enterrar este tema cuanto antes y mirar hacia el futuro, el portavoz del PP en la Comisión de Justicia e Interior del Congreso mostró su descontento con el fallo judicial porque seguía “sin intuirse cuál puede ser la autoría intelectual” de la masacre.
El diputado, que se encontraba en los cursos de verano de la Universidad Complutense en El Escorial, no ve “ninguna conexión con ningún grupo internacional, ni Al Quaeda ni ningún otro, sino que habla de un grupo terrorista independiente”.
Sus palabras muestran como en el PP todavía conviven dos almas. Las que no están nada convencidas de cómo se ha resuelto el tema y las que defienden que se zanje la polémica y se hable de economía, de los problemas de los españoles, de la consulta de Ibarretxe, del etarra De Juana Chaos...
En esa línea se mantuvo ayer Pío García-Escudero. El portavoz del PP en el Senado, cree que “hoy por hoy” la sentencia del Tribunal es la que tiene valor y la que explica los atentados. “La acatamos y aceptamos”, señaló.
Defendió que la justicia “es uno de los pilares del Estado de Derecho” y “por lo tanto hay que respetar sus decisiones, confiar en ella y darlas por buenas”. Para él “lo más importante” fue que se detuvo y se juzgó a los autores.
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A pesar de ello dejó una puerta entreabierta al afirmar que “a partir de ahora, el futuro no lo conoce nadie, pueden seguir saliendo determinados indicios o cuestiones que hoy no conocemos. Si es así, la obligación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado será seguir investigando”.
Contundente
El alcalde de Madrid fue el más tajante. Alberto Ruiz-Gallardón dijo que “nunca” un político debe sustituir aquello que le corresponde a los jueces.
En declaraciones a Punto Radio el regidor madrileño consideró que los jueces habían hablado “con plena libertad”. “En un democracia, a cada uno le corresponde asumir sus responsabilidades y la de juzgar y hacer ejecutar lo juzgado, de perseguir el delito y de castigar a aquellos que lo han cometido, lo asumen los jueces con la ayuda de los fiscales y de todos los órganos de persecución”, argumentó.
Rajoy prefirió seguir sin hablar y sus principales colaboradores se dedicaron a analizar la crisis en la inauguración de la escuela de verano del PP en Sanxenxo. Sólo María Dolores de Cospedal le puso la puntilla. Al ser preguntada por los periodistas si daba por zanjada la teoría de la conspiración, dijo: “Esa teoría no sé de quién es, desde luego nuestra no”.