Las elecciones del 22-M, aunque autonómicas y municipales, también afectan a la composición de las Cortes Generales, que ven marcharse y llegar a diputados y senadores. 

Hoy martes se procedió de hecho en la Cámara alta a la remodelación del equipo de dirección del Grupo Socialista que comanda Carmela Silva, motivada por la baja de la que desde 2008 era secretaria general, Ruth Porta, que se incorporará el próximo sábado, 11 de junio, como concejala al Ayuntamiento de Madrid. Porta, también exdiputada en la Asamblea de Madrid, concurrió este 22-M como número dos de Jaime Lissavetzky. En los dos últimos años, la mano derecha de Silva ha actuado como eficaz interlocutora con el resto de partidos de la Cámara. 

Las tareas de la Secretaría General serán desempeñadas a partir de ahora por José Miguel Camacho, senador por Toledo y hasta ahora portavoz adjunto del grupo. 

También deja la Cámara y la portavocía adjunta del PSOE María Ascensión Murillo, que pasará a ocupar su escaño en la Asamblea de Extremadura, pese a que no es incompatible ser diputado autonómico y senador. Murillo es también portavoz de la ejecutiva de los socialistas extremeños.

A la dirección del grupo se suman tres mujeres como portavoces adjuntas Yolanda Vicente (parlamentaria por Álava) y hasta ahora portavoz en las comisiones de Economía y Presupuestos; Esmeralda Iranzo (Teruel), portavoz en la Comisión de Medio Ambiente, y Raquel Miriam de Andrés (Palencia), vicepresidenta primera de la Comisión de Sanidad. Permanece también como portavoz adjunto Antonio Gutiérrez Limones, senador por Sevilla y alcalde de Alcalá de Guadaíra. 

Silva, durante la reunión del Grupo Socialista, subrayó el 'enorme mérito, dedicación, entrega y profesionalidad' de Porta y Murillo en estos tres años de legislatura y se mostró segura de que la nueva dirección 'podrá seguir haciendo frente al momento político', informó el partido a través de un comunicado. 

El Grupo Socialista se compone ahora mismo de 104 senadores (más los diez del PSC, que están en la Entesa Catalana). Uno menos, por cierto, de los que tenían hace un mes, dada la renuncia de Lino González, acusado por el Supremo de abusos a menores. Su escaño no se puede reemplazar, porque él ya sustituía a otro parlamentario. Tras las elecciones del 22-M, las cuentas no están claras, pero los socialistas podrían perder un representante por Madrid, Cantabria y Murcia, aunque, según fuentes del grupo, podrían ganar uno por Aragón y Balears.