A la cúpula del PP le cansa que cada dos por tres le pregunten sobre la candidatura de su partido para el Principado, pero tampoco hace nada por zanjar el tema cuanto antes. Mientras en Asturias los conservadores mantienen un enfrentamiento que amenaza con gangrenarse, los que rodean a Mariano Rajoy no quieren saber nada de este asunto hasta después de las elecciones catalanas.

Ayer, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, reconoció, en una entrevista en Punto Radio, que esta situación va para largo y que están trabajando en ello aunque sin ningún éxito. 'El PP de Asturias junto con la dirección nacional del partido no han llegado a un acuerdo sobre cuál es el mejor cabeza de cartel', confesó.

Los anticasquistas avisan de que las listas las hace el comité regional

Además, dijo que la persona elegida 'tiene que contar con el apoyo popular y debe ser una persona a la que el partido quiera defender y luchar para sacar esa candidatura'.

Sus palabras fueron rápidamente interpretadas por los dos sectores en liza. Y cada uno de ellos hizo su propia lectura. Los que respaldan a Francisco Álvarez-Cascos creen que si aún no se ha llegado a un entendimiento es porque Rajoy no piensa en Isabel Pérez-Espinosa, la concejal oventense que propone el PP de Asturias, como opción ganadora. 'Si lo fuera ya le habrían dado el visto bueno y se habría acabado esta guerra en septiembre', dicen mientras mantienen todas sus esperanzas puestas en el ex ministro.

Los casquistas siguen defendiendo que su vuelta es 'un clamor popular' y que sería 'una hecatombe' que no se produjera. 'Hay gente que afirma que si no lo es no votará al PP por cabreo', cuentan sus seguidores. Su gente de confianza afirma que Cascos está 'muy tranquilo' y 'trabajando ya en historias que atañen a Asturias'. Los que lo rodean afirman que él no necesita ser confirmado hasta enero. Tendría tiempo para formar su equipo, elaborar su proyecto y presentarlo en sociedad. 'Él ya es de sobra conocido', destacan.

Pérez-Espinosa señala que trabajan 'por un proyecto' y 'no por un nombre'

Por otro lado se sitúan los que abogan por la 'regeneración' de la formación regional. Para ellos, lo dicho por Cospedal ha sido 'para salir al paso' y afirman que, en todo caso, sirve para recordar que esta cuestión se debe dirimir con el PP de Asturias y no con plataformas ciudadanas de apoyo.

Recuerdan que ya en su día el presidente del PP, Ovidio Sánchez, trasladó a Rajoy la oposición de su partido a Cascos y confían en que la decisión de sus órganos sea tenida en cuenta. En la formación regional no comprenden la insistencia del ex hombre fuerte de Aznar y advierten que, por mucho que la dirección imponga su nombre, las listas electorales las elaborará el comité electoral regional y él no podrá incluir a ninguno de sus colaboradores.

En rueda de prensa, Pérez-Espinosa mantuvo ayer que en el PP asturiano 'no trabajan por un nombre, sino por un proyecto', aunque admitió que sería 'mejor' que el proceso de selección del candidato estuviera ya cerrado.