A tres días de que se abra la X Asamblea Federal de Izquierda Unida (IU) la mayor parte de los dirigentes de la formación -casi medio centenar- han dado su apoyo a la reelección de Cayo Lara como coordinador federal en un documento en el que resaltan su contribución 'en influencia social, política cultural y electoral'.

No firman, sin embargo, ni el diputado Gaspar Llamazares, ni Antonio Cortés, ni Montserrat Muñoz -miembros de la Comisión Ejecutiva Federal-, cuyo partido, Izquierda Abierta, se había mostrado ayer muy crítico tras la reunión de la ejecutiva en Madrid, por la falta de 'voluntad política' -según denuncian- de integrar a las minorías y hacerlas partícipes de la nueva dirección y estructura organizativa.

Tampoco lo hace el dirigente de IU-Extremadura, Pedro Escobar, enfrentado desde el verano de 2011 con la dirección federal por su decisión de permitir -absteniéndose en la votación clave- que José Antonio Monago, del PP, gobernara en Extremadura después de 28 años de ejecutivos socialistas.

Lara, que ayer se dijo 'disponible' a encabezar una lista para la reeelección en la Asamblea que se celebra el próximo fin de semana, recibe así el apoyo mayoritario de los dirigentes de IU. Entre ellos estarían casi todos los coordinadores de las federaciones, la mayor parte de los diputados y  miembros de la Ejecutiva Federal y la Presidencia Federal.

Los firmantes del documento de apoyo a Lara sostienen que esta elección se dirige a 'situar a Izquierda Unida en este tiempo de excepción en el referente, para desalojar al PP del poder y construir una Alternativa Política de mayoría social frente al deterioro del Estado social y la democracia'.

Y justifican decantarse por el actual coordinador por 'el ataque sin precedentes contra el empleo, la producción nacional, los servicios públicos, los pensionistas, la propia democracia y nuestra soberanía nacional, que requiereuna respuesta cada vez más contundente y organizada contra la intervención de la Troika consentida y apoyada por el Gobierno del PP'.

La mayoría de IU, ligada al Partido Comunista de España (PCE), se había movilizado para conseguir llegar a la X Asamblea con una lista unitaria encabezada por Lara, que sirviera para dar una imagen de unidad poco común en la formación. Las reclamaciones de Izquierda Abierta han ido creciendo en los últimos días y ayer, fuentes cercanas a la dirección de la federación aseguraron a Público que habían decidido ponerse manos a la obra para recoger el máximo número de avales y, en el caso de no llegar a ningún tipo de pacto con la actual dirección, dejar abierta la posibilidad de presentar su propia lista alternativa.

Desde la dirección de IU, sin embargo, creen que en ningún momento se vivirán el próximo sábado -día en el que se desvelarán las listas- momentos de tensión como los de la IX Asamblea, a la que se presentaron cinco candidaturas distintas y que se cerró en falso sin la confirmación de un líder.