María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP, ante un grupo de jóvenes de su partido en Toledo el pasado 6 de marzo: 'Muchos jóvenes confiaron en él [Zapatero]. Y sin embargo, ahora el fracaso escolar y el abandono temprano suman juntos una tasa del 60% entre los jóvenes españoles'. Tres días después, ante una audiencia similar, repitió el mismo mensaje en Córdoba. El pasado 20 de mayo, en Madrid, esta vez ante los periodistas en un desayuno informativo, volvió a usar el dato y añadió una aclaración: 'Un 60% de los jóvenes españoles son ninis. Ni estudian ni trabajan'.

La suma del 30% de alumnos que fracasan y el 30% que abandonan es tan erróneo como sumar peras con manzanas. El abandono escolar es una consecuencia del fracaso escolar. La relación entre ambos fenómenos es tan estrecha que son los mismos alumnos los que forman parte de ambas estadísticas. El estudio Fracaso y abandono escolar en España de la Fundación La Caixa presentado ayer en Madrid explica el error de la que fue interlocutora con el Gobierno en las frustradas negociaciones por el Pacto Educativo. Un 88% de los alumnos que repiten curso finalmente abandona el sistema.

El cálculo de la tasa de fracaso escolar es el resultado de una foto fija en una determinada edad. Esa radiografía en España dice que un 30% de los estudiantes de ESO que deberían acabar 4º de Secundaria no lo ha hecho. El mismo método sirve para analizar qué porcentaje de jóvenes ha dejado de estudiar o no ha continuado con sus estudios postobligatorios. En España, ese porcentaje es también del 30%. No es casualidad. Como revela el estudio de la Fundación La Caixa, los problemas que acaban echando a los alumnos del sistema de formación comienzan desde Primaria, donde un 10% de los alumnos ya repite curso.

Ambas tasas son en España el doble de la media europea. La negociación frustrada del Pacto por la Educación sirvió para poner en común la rebaja de esos porcentajes como el objetivo prioritario. El reciente Plan de Acción 2010-2020 presentado por el Ministerio de Educación pretende bajar un 50% esa tasa en la próxima década.