La Diputación Foral de Guipúzcoa, gobernada por Bildu, rechazó ayer el ataque contra el monolito levantado en memoria del ex gobernador civil del territorio, el socialista Juan María Jáuregui, asesinado por ETA en 2000.

El Ejecutivo foral hizo público un comunicado en el que mostraba su 'rechazo' al sabotaje, 'al igual que rechaza todo tipo de acción violenta, independientemente del origen de la misma'.

Además de ratificar su compromiso para 'trabajar en favor de la paz y la democracia', la Diputación afirmó que 'todas las víctimas merecen el reconocimiento y la reparación', y que esto es un 'paso fundamental' para superar todas las 'consecuencias del conflicto y del uso de cualquier tipo de violencia'.

El Ejecutivo de Bildu mostró esta repulsa después de que la Ertzaintza confirmara ayer el sabotaje, perpetrado la semana pasada. Antes de conocerse el comunicado de la Diputación, la viuda de Jáuregui y directora de la Oficina de Atención a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco, Maixabel Lasa, dijo que le gustaría que ante 'estos episodios, aunque sean puntuales, la gente no se calle y diga lo que piensa, pues todos queremos mirar al futuro con optimismo'.

Bildu anunció que sus ediles 'no votarán' la moción del PP en la que se condenan 'todos y cada uno de los asesinatos' de ETA y se pide su disolución. En su lugar, presentará un texto en defensa del 'diálogo y el acuerdo' para avanzar hacia la 'paz definitiva'. Según la coalición, la moción del PP, que se debatirá hoy en Ermua, 'responde a esquemas superados (...). La sociedad ha decidido construir la paz y la decisión no tiene vuelta atrás'.