¡Bañistas, dejen paso al almirante!

Los galones siguen pesando en las Fuerzas Armadas españolas, aunque los mandos vayan en bañador. Los usuarios que quieren bañarse en la piscina climatizada de los Pabellones Polideportivos de los Batallones de Ferrol (A Coruña) tienen prohibido estorbar las brazadas de los oficiales de la Armada, si no quieren que el socorrista de turno les llame al orden.

Varios ex oficiales denunciaron este jueves la existencia de una circular, que se reproduce en la imagen superior, firmada por el capitán de navío de dichas "instalaciones militares de uso civil", a través de la cual se comunica a los usuarios que la primera calle de la piscina queda reservada, "en todo momento", a los almirantes, capitanes de navío y coroneles.

Los propios ex militares explicaron que los responsables de la piscina "son absolutamente tajantes en el cumplimiento de esa norma". "Ha habido incluso niños que han sido conminados a abandonar la primera calle inmediatamente ante la llegada de uno de los oficiales del destacamiento", explicaron. Al ser de uso civil, cualquier vecino de Ferrol puede entrar a las instalaciones deportivas de la Armada previo pago de una entrada, indicaron los antiguos oficiales. Las familias de los militares entran, sin embargo, gratis.

El asunto ha llegado hasta el Congreso de los Diputados de la mano del BNG. Su portavoz, Francisco Jorquera, presentó el miércoles una pregunta por escrito al Gobierno exigiendo explicaciones al Ministerio de Defensa sobre este tipo de conductas que el líder nacionalista galego consideró "totalmente abusivas".

"Nos parece algo propio de una época pretérita, que no está en absoluto acorde con el funcionamiento de una sociedad democrática como en la que vivimos ", lamentó Francisco Jorquera.