La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) anunció este miércoles que mantiene los tipos de interés en la horquilla actual del 5,25 % y el 5,5 %. Este es el segundo respiro consecutivo tras el aprobado el pasado mes de septiembre. Pese a esta congelación, los tipos de interés en Estados Unidos siguen en su nivel más alto desde el año 2001, ya que desde julio de 2022 en el último año registraron diez subidas consecutivas, y sólo tres congelaciones en junio, septiembre y ahora.

La Fed, sin embargo, no descarta volver a subir los tipos en un futuro cercano. "El Comité seguirá evaluando información [económica] adicional para determinar el alcance de un endurecimiento adicional de la política monetaria", apunta la nota de la Reserva Federal. Podría ser, por tanto, que la Fed apruebe alguna subida en la reunión que tiene antes de fin de año, el 12 y 13 de diciembre.

La decisión de un posible aumento de los tipos dependerá de si se consigue el objetivo de que la inflación no supere el 2%. En cualquier caso, esta pausa en la subida de los tipos se da en un contexto complejo para la inflación. Tras una racha de más de un año de bajadas desde el pico del 9,1% alcanzado en junio de 2022, los precios registraron una subida de cinco décimas en agosto, hasta el 3,7%, el segundo alza consecutivo y se mantuvieron en la misma cifra en septiembre.

Sin embargo, la tasa anual de la inflación subyacente, que mide la subida de precios sin contar ni la energía ni los alimentos –y es uno de los indicadores en los que más se fija la Fed para tomar sus decisiones– cayó dos décimas en septiembre y confirmó su tendencia a la baja.

La actividad económica mejora

En cuanto a la evolución económica, la Fed señala "que la actividad se expandió a un ritmo fuerte en el tercer trimestre", al tiempo que "el aumento del empleo se ha moderado desde principios de año, pero sigue siendo fuerte y la inflación sigue elevada".

"Es probable que las condiciones financieras y crediticias más estrictas para los hogares y las empresas afecten a la actividad económica, la contratación y la inflación", señala la Reserva Federal de cara al futuro.

Sin embargo, Estados Unidos ha registrado un inesperado repunte en su producto interior bruto, al avanzar el 1,2% en el tercer trimestre, con un ritmo anual de crecimiento del 4,9%, según los datos publicados la pasada semana por la Oficina de Estadísticas Económicas (BEA).

En cuanto al mercado laboral, otro de los datos clave que analiza la Fed para decidir posibles subidas, la creación de empleo en el mes de septiembre se mantuvo robusta, con 336.000 puestos netos nuevos, y la tasa se mantuvo estable en el 3,8%.