Una patronal de pymes lleva a las instituciones europeas su lucha por "democratizar" el diálogo social

Nacida en mayo de 2021, y con el aval de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, la asociación Conpymes (que tiene en su núcleo original a la patronal catalana Pimec pero ha ido incorporando patronales de la pequeña y mediana empresa de muchos otros territorios del Estado) siempre se ha caracterizado por querer formar parte de las mesas de diálogo social a través de las mejoras de su representatividad en estos espacios. Ahora, ha llevado su reivindicación a las instituciones europeas, trabajando conjuntamente con éstas, de forma que "la Comisión Europea tiene previsto emitir un informe durante el primer semestre de 2023, en el que se espera que le dé un tirón de orejas al Gobierno español sobre la anomalía del diálogo social". 

Así lo explica el presidente de Conpymes, José María Torres. "Queremos romper el monopolio de la CEOE como único actor en la negociación colectiva. Aunque la Administración reconoce que nuestra presencia está justificada, se ampara en que no existen instrumentos para medir nuestra representatividad".

Torres lamenta que las pymes y autónomos que, por ejemplo, solo en Catalunya representan más del 90% del tejido productivo, aportando más del 60% del PIB y el 70% del empleo, estén excluidas y marginadas de los órganos de decisión ante las administraciones. "Solo Cepyme ha conseguido un cierto reconocimiento, pero siempre va de la mano y acaba votando con la CEOE". En este sentido, el presidente de Conpymes recuerda que en determinadas medidas, como el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), el impuesto a las energéticas y la ley que establecerá un régimen sancionador contra la morosidad, que lleva dos años bloqueada, Cepyme siempre se ha mostrado contraria a sus propuestas.

Demanda judicial

Desde el pasado mes de abril, el conflicto iniciado por Conpymes para reclamar su representatividad en el marco del diálogo social se encuentra judicializado con una demanda frente a la Audiencia Nacional. Aparte de la vía judicial, Torres compara el enfrentamiento que está viviendo la asociación con el que se produjo años atrás entre Pimec y Foment del Treball. En aquél, la primera reclamaba su legitimidad para formar parte de las mesas de diálogo social y poder optar a los concursos de contratación pública. Por último, el Govern de la Generalitat acordó la presencia a partes iguales de ambas patronales en los ámbitos de negociación, aunque Pimec representa casi el 98% del tejido empresarial. "Al igual que ocurrió con la Generalitat, el Gobierno español ahora tiene miedo a legislar contra la gran patronal, sea Foment o la CEOE", lamenta Torres.

Conpymes considera inadmisible que la CEOE esté bloqueando el diálogo social, negándose a negociar la imprescindible revalorización de los salarios, así como que digan que la subida de las cotizaciones máximas afecta gravemente a las pymes cuando muy pocas de ellas tienen salarios por encima de los 50.000 euros. "Defienden exclusivamente a los oligopolios, monopolios y grandes empresas, siendo la única patronal en Europa que está en contra de limitar las rentas excesivas de los oligopolios europeos eléctricos".

La patronal recalca que, "aunque en los medios de comunicación se habla siempre de ATA como la más representativa, es falso, ya que, con el sistema actual de medida, Uatae, organización que forma parte de Conpymes y que está en la órbita de CCOO, ocupa oficialmente el primer puesto". Si se suma al resto de organizaciones que forman parte de Conpymes, la patronal aglutina a la mayoría de los autónomos de España.

Expansión estatal de Pimec

Desde Pimec se ha iniciado una ofensiva para ampliar su representación en el Estado español de la mano de Conpymes, de la que también forman parte la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (COAG), la organización de transportistas Fenadismer y la mencionada Uatae. De hecho, a mediados de noviembre, la patronal de la pequeña y la mediana empresa catalana presentó la nueva Comisión Ejecutiva de PIMEC Jóvenes Madrid, que inicia su andadura con el fin de tener una mayor y mejor representación y defensa de los intereses de los empresarios y emprendedores jóvenes y con la voluntad de convertirse en un espacio de encuentro para este colectivo.

Con este grupo de jóvenes, Pimec pretende establecer alianzas entre los jóvenes que interactúan en el ámbito empresarial, alinear objetivos y conseguir un diálogo más efectivo con los representantes de los diferentes organismos e instituciones que influyen en las decisiones que afectan a los jóvenes y que se dilucidan fundamentalmente en Madrid.

La relación con Foment

La aparición de Conpymes ha reabierto el debate sobre la conveniencia de llevar a cabo un proceso de integración o fusión entre patronales como las catalanas Pimec, Foment o la propia Conpymes. Al respecto, el presidente de esta última, José María Torres, rechaza esa posibilidad. "Tenemos modelos distintos y una unión no sería posible ni viable desde el punto de vista jurídico. Nosotros representamos a las pymes y Foment a los grandes empresarios".

Los rumores sobre esta posibilidad surgieron en el marco de la campaña electoral de la CEOE, que celebró elecciones el pasado 23 de noviembre. En los comicios, Foment, integrada en la CEOE, presentó una candidatura alternativa, encabezada por Virginia Guinda, a la oficial del presidente, Antonio Garamendi. En las elecciones, Garamendi ganó con un 83% de los votos, mientras que Guinda obtuvo un 13%. Las fricciones entre la CEOE y Foment se han evidenciado de forma sutil en la composición de la nueva junta directiva. Hasta ahora, el presidente de Fomento del Trabajo, Josep Sánchez Llibre, ejercía como vicepresidente, pero también era responsable de la Comisión de Relaciones con las Cortes, dado que el catalán había sido anteriormente diputado en el Congreso. Con la nueva junta, Sánchez Llibre mantiene el cargo de vicepresidente, pero la comisión la dirigirá Salvador Navarro, presidente de la Confederación de Empresarios Valencianos (CEV), que sale reforzado, al igual que Miguel Garrido, presidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), que ocupará el cargo de nueva creación de vicepresidente primero.

Más allá de la resolución del conflicto de Conpymes por su representatividad, que ahora se encuentra en los juzgados y en las instituciones comunitarias, éste supone un episodio más de las diferentes concepciones e intereses que se entrecruzan en el mundo de las patronales catalanas y estatales en función de si representan a las medianas y pequeñas empresas o a las más grandes.