El coste del rescate bancario El Estado ya sólo podrá recuperar como máximo 9.857 millones por Bankia, menos de la mitad de lo que costó rescatarla
Las ayudas a la banca entre 2009 y 2017, según los datos actualizados por el Banco de España a 31 de diciembre del año pasado, superaron los 64.000 millones. De momento sólo se han recuperado 5.150 millones de euros, menos del 9%. El Banco de España calcula que sólo se podrá recuperar otro 15% a través una privatización de Bankia.
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madrid, Actualizado:
El rescate bancario tiene un alto coste: en concreto, a 31 de diciembre de 2017 se situaba en 64.953 millones de euros. En esa fecha, los recursos netos destinados al apoyo del sistema financiero se situaban en 42.621 millones aportados por el Estado y 22.332 millones por el propio sector a través del Fondo de Garantía de Depósitos.
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Según los datos actualizados por el Banco de España, entre 2009 y 2017 las ayudas públicas a la banca en forma de apoyo de capital —en dinero constante y sonante— en el rescate bancario han ascendido a 64.098 millones de euros en fondos aportados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y el Fondo de Garantía de Depósitos.
Además de las aportaciones de capital, se estiman los fondos provisionados para hacer frente a los costes que puedan derivarse de garantías concedidas en los procesos de integración y venta, cuyos importes actualizados se cifran en 11.590 millones de euros en el caso de los Esquemas de Protección de Activos (EPA) y 2.026 millones para otras garantías, algunas de ellas ya ejecutadas.
De todo ese dinero, a 31 de diciembre de 2017, sólo se habían recuperado 5.150 millones —menos del 9%— han sido recuperados a través de reembolsos, venta o resolución de entidades. De esa cantidad recuperada, 4.477 millones corresponden al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y 673 millones al Fondo de Garantía de Depósitos
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¿Se podrá recuperar algo más de ese 9%? El Banco de España calcula que sólo se podrán recuperar 9.857 millones por la privatización de Bankia, menos de la mitad de lo que costó su rescate, que ascendió a 24.069 millones de euros. El resto de entidades financieras ya no van a dar dinero al Estado.
Este concepto de coste no incorpora las pérdidas que han soportado los antiguos accionistas, ni las de los tenedores de preferentes y deuda subordinada, como resultado de los ejercicios de gestión de híbridos realizados como parte del acuerdo de asistencia financiera firmado con el MEDE. Tampoco incorpora los intereses obtenidos, ni los gastos incurridos.