Cofina renuncia a comprar la filial portuguesa de Prisa al frustrarse su ampliación de capital
El grupo de comunicación español emprenderá acciones contra la compañía lusa por "incumplir" el contrato de compraventa de Media Capital
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LISBOA, Actualizado:
El grupo editorial portugués Cofina dijo que ha abandonado sus planes de comprar Media Capital a la española Prisa, después de que la ampliación de capital necesaria para financiar el acuerdo se fuera al traste por la inestabilidad del mercado debido al brote de coronavirus.
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Las acciones de la empresa se desplomaban hasta un 14% tras el anuncio el miércoles, mientras que las de Prisa se dejaban un 13%.
Cofina ya se había dejado un cuarto de su valor desde que a finales de enero alcanzara máximos anuales, tocando su menor nivel desde diciembre, mientras la expansión del brote de coronavirus provocaba fuertes perdidas en los mercados mundiales.
El grupo dijo en un comunicado poco después de medianoche que su oferta de casi 189 millones de acciones nuevas no había registrado suficiente demanda y que había decidido no llevar a cabo la operación "debido al significativo deterioro reciente de las condiciones del mercado".
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La ampliación de capital era una condición clave para adquirir por 123 millones de euros Media Capital, que opera uno de los mayores canales de televisión en Portugal, TVI.
El acuerdo habría convertido a Cofina, propietario del tabloide Correio da Manha y el diario empresarial Jornal de Negocios, en el mayor grupo de medios del país.
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La operación, que valoraba Media Capital en 205 millones de euros, incluía la deuda de TVI de 75 millones de euros. Prisa dijo en su momento que la transacción implicaría pérdidas en sus cuentas consolidadas.
Prisa dijo en un comunicado al regulador español que iba a iniciar "todas las acciones frente a Cofina previstas bajo el contrato de compraventa".
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El grupo de medios español agregó que continuará con su hoja de ruta centrada en sus activos de educación y medios de comunicación estratégicos, al tiempo que mantendrá una política activa de desinversiones de sus activos no estratégicos.